Desmantelan una banda que robaba móviles infiltrándose en las fiestas de la discoteca Fabrik

El equipo de seguridad de la discoteca Fabrik, en colaboración con la Policía Local de Humanes y la Guardia Civil, ha logrado desmantelar una banda organizada que se infiltraba en las fiestas del conocido recinto madrileño para hurtar teléfonos móviles al descuido entre los asistentes.

La operación se puso en marcha después de que una joven fuera interceptada a la salida de la discoteca con una docena de móviles ocultos bajo la ropa. Su detención permitió identificar y arrestar a varias personas más que habrían participado en los robos, según han informado los responsables del local.

El hallazgo fue posible gracias al refuerzo de los cacheos y controles de seguridad que la dirección de Fabrik había implantado recientemente. Desde la discoteca explican que la banda actuaba con un "modus operandi perfectamente coordinado" y un método "rápido y sincronizado".

El sistema consistía en que uno o varios miembros sustraían los teléfonos de bolsos o bolsillos aprovechando el ambiente festivo y la aglomeración, para después traspasarlos rápidamente de mano en mano hasta que llegaban a la joven encargada de sacarlos del recinto ocultos bajo la ropa.

"La cadena de traspasos era tan rápida que, cuando la víctima se daba cuenta del robo, el teléfono ya estaba a metros de distancia", aseguran desde el equipo de seguridad de Fabrik

El local ha reforzado de forma significativa las medidas de prevención de delitos tras la llegada de un nuevo responsable de seguridad. En la actualidad, 150 agentes vigilan los accesos y las salas, y se ha incorporado la figura de vigilantes de paisano, que se mezclan entre el público para detectar comportamientos sospechosos.

Además, se han intensificado los controles en las salidas con cacheos preventivos, una medida que ha permitido detectar y detener a los miembros de esta red de hurtos.

Según los datos de la discoteca, los robos de teléfonos móviles en Fabrik se han reducido en un 75% en el último año, aunque recuerdan que los hurtos al descuido siguen siendo uno de los delitos más comunes en los locales de ocio nocturno, y en muchos casos no se denuncian porque las víctimas piensan que han perdido el terminal.