Pueden reclamar TODOS, tanto consumidores como empresarios que hayan pedido un préstamo hipotecario. La única diferencia es que los primeros -los consumidores- no tienen límite para reclamar.
En cuanto a la retroactividad y el alcance en el tiempo de esta decisión, será el propio Tribunal Supremo el que se tenga que pronunciar, aunque las asociaciones de consumidores son bastante optimistas al respecto.