Los impresionantes campos amarillos de colza, una planta que aún arrastra su ‘mala fama’

La imagen de los campos de colza en primavera es espectacular. Sus pequeñas flores amarillas cubren el campo por completo. Muchos niños que hacen su Primera Comunión aprovechan para hacerse aquí las fotos, coincidiendo que en mayo es cuando todas las flores se abren, aunque tienen que darse prisa, porque el campo solo se verá amarillo durante dos semanas.

Una planta con 'mala fama' que adoran en otros países

César tiene en Arévalo (Ávila), desde hace ya catorce años, una extensión de ocho hectáreas de campo de colza. En mayo su imagen es realmente hermosa. Y cuando llueve mucho, el espectáculo es aún mayor.

La planta de colza sirve para obtener aceite. La idea inicial, nos cuenta César, era usarlo para biodiesel, pero al final se utiliza para aceite vegetal. Se consigue de las semillas que se recogen de la planta, que tienen solo un milímetro y medio de tamaño. El aceite que se obtiene es de textura viscosa y color amarillo oscuro. Además, las plantas también se utilizan para alimento del ganado, para pienso.

En España el aceite de colza no tiene apenas demanda, por culpa de la intoxicación que se produjo en los años 80. “No tienen nada que ver con la producción de esta planta, sino con las malas prácticas y la falta de escrúpulos que tuvo aquella gente, que mezcló aceite de motor con aceite de colza”.

Este aceite de colza adulterado produjo en 1981 una auténtica tragedia: murieron más de 3.800 personas y dejó más de 20.000 afectados.

Sin embargo, y aunque aquí en España aún ‘pesa’ esa tragedia, la colza es una planta muy demandada en otros lugares y aquí en nuestro país se cultiva cada vez más, porque además es muy buena para la rotación en los campos con la cosecha de cereales.