Todos soñamos con una vida mejor en la que, por qué negarlo, el dinero jugaría un papel importante. ¿Qué cambiaríamos y qué caprichos nos daríamos si, al menos por unos días, fuéramos ricos? Nuestra reportera Amaya Rey ha cogido su cámara para descubrirlo.
Desde acceder a zonas vip para ver los partidos de fútbol a todo lujo, con las mejores vistas, el más sabroso catering y todos los servicios; pasando por los más exclusivos restaurantes con una media de 200 euros el menú; o tiendas donde ser cenicienta y lucir zapatos de 3.500 euros y joyas que superan los 80 mil euros. Pero si además añadimos poder viajar en una increíble limusina de 9 metros con la que es imposible pasar inadvertido, o más aún, en un vuelo privado a bordo de un helicóptero de 4 millones de euros que no sabe de atascos, sin duda la guinda del pastel será acabar la jornada en una casa de 5 millones de euros en la zona más exclusiva de Madrid, cuyos dueños tuvieron de vecino al mismísimo David Beckham.