Visitamos la tumba de William Shakespeare y descubrimos su curioso epitafio

  • La ciudad de Stratford-upon-Avon es un lugar muy importante en la historia del dramaturgo 
Foto: Redacción |Vídeo: Telemadrid

William Shakespeare es muy querido en Birmingham, concretamente en Stratford-upon-Avon, donde se encuentra la iglesia de la Santísima Trinidad, donde el dramaturgo fue bautizado y, también, enterrado tras su muerte el 23 de abril de 1616, un día después que Miguel de Cervantes.

De hecho, ese templo se ha convertido en todo un museo del poeta y por eso a la entrada encontramos expuestas su partida de bautismo y de defunción.

“Abstente de cavar en el polvo aquí encerrado. Maldito el que remueva mis huesos”

Una vez dentro, contemplamos lo impresionante que es esta iglesia con grandes vidrieras de la época victoriana que la convierten en un espacio muy luminoso.Justo en esta zona de vidrieras se encuentra la tumba de Shakespeare, en la parte más antigua del templo religioso que data de 1249.

Y sobre la tumba del poeta, su epitafio que cita una especie de maldición para proteger el sepulcro: “Abstente de cavar en el polvo aquí encerrado. Maldito el que remueva mis huesos”, dice.

Lo cierto que es parece que este epitafio le está protegiendo ya que la tumba nunca ha sido abierta desde su fallecimiento.

Una de las preguntas sobre el dramaturgo es saber cómo era físicamente, y en esta iglesia se nos ofrece un busto que se realizó antes de su muerte y que parece ser el retrato físico más fiable de William Shakespeare.

Mejores Momentos

Programas Completos