Bulgaria, el país más antiguo de Europa donde sí quiere decir no

  • Paseamos por lugares que son una parada obligada para todos los turistas 
Bulgaria
Bulgaria |Archivo

Si nunca has estado en Bulgaria seguramente te parezca un país misterioso, y eso que no conoces muchas de sus peculiaridades y los sorprendentes sitios que esconde.

Su capital Sofía, concentra muchos de ellos como la catedral de Sofía dedicada a Alexander Nevski, todo un icono de la ciudad. La iglesia más grande del país y uno de los templos ortodoxos más grandes del mundo con sus más de 3.000 metros cuadrados y capacidad para 10.000 personas.

Catedral de Sofía / Archivo
Catedral de Sofía |Archivo

Si su tamaño y su gran fachada impresiona, su interior no te dejará indiferentes con sus grandes mosaicos e imágenes que se aprecian con unas grandes lámparas que iluminan una oscura estancia envuelta de misticismo.

Lo mejor de esta catedral, es que la entrada en gratis por lo que ya no tienes excusa para hacer una parada en tu viaje. Un apunte, si desear realizar fotografía dentro del templo, sí que tendrás que abonar la cantidad de 5 euros.

Si las iglesias no son tu pasión cuando vas de turismo hay una que no te puedes perder, la iglesia de Boyana, templo que fue declarado Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO en 1979 por los frescos que hay en su interior que datan de 1259 y que inundan sus paredes. Estas obras de arte, han sido considerados únicos por su color y porque logran reflejar las tradiciones del siglo XIII.

Aquí se representa uno de los ejemplos más completos y mejor conservados del arte medieval de Europa Oriental ya que, desde la antigüedad, varios poblados ocuparon el territorio de Bulgaria dejando su influencia en el país y haciendo que un paseo por sus calles sea un auténtico viaje al pasado.

¿Te apetece un paseo por uno de sus mercados más representativos?

Hablamos del Mercado Central, con una extensión de 3.200 metros cuadrados en un espacio cubierto donde hay numerosos puestos regentados por familias búlgaras desde 1911 y donde se venden todo tipo de productos tradicionales como pan, aceitunas, nueces, aceite, frutas, vegetales y hojaldres.

Mercado Central / Archivo
Mercado Central |Archivo

Además, en su segunda planta, también se pueden adquirir joyas y otro tipo de accesorios.

Continuamos con las compras en Boulevard Vitosha, uno de los lugares comerciales más importantes de la ciudad donde encontramos una de las muchas curiosidades del país como los Klek shops, pequeños puestecitos ubicados casi a nivel del suelo donde los compradores tienen que agacharse para elegir los productos.

Klek shops / Archivo
Klek shops |Archivo

La explicación es que estas tiendecitas están ubicadas en sótanos con una ventana que da hacia el exterior y que han convertido en un pequeño kiosko donde los viandantes pueden comprar bebidas, snacks e, incluso, fruta.

Y para terminar con esta pequeña visita guiada, ¿sabías que cuando los búlgaros dicen que no con la cabeza en realidad quieren decir que sí y viceversa?

Esto es un lío para los turistas e incluso para los propios ciudadanos del país puesto que, por cortesía, intentan adaptarse a los visitantes los cuales ya no entienden ya si están afirmando o negando.

Son muchas las leyendas del origen de esta tradición, pero la más extendida tiene que ver con la religión cuando el país estaba bajo el poder turcos, los cuales quería convertir a los búlgaros al islam, pero ellos no estaban de acuerdo por lo que cuando les preguntaban si creían en Alá, decían que sí con la cabeza, aunque en realidad estaban negando para ser fieles a su Dios.