Si en 2014, Madrid se convirtió en la capital de Europa; en 2016 volvió a ocurrir lo mismo.
El hito histórico de que dos equipos madrileños volvieran a verse las caras en una final de Champions paralizó el mundo del fútbol y, aunque Milán fuera la sede del encuentro, Madrid se erigió como capital europea del fútbol.
Real Madrid y Atlético de Madrid volvían a disputarse el trono del Viejo Continente. Para unos, la gloria por undécima vez; para otros, la primera de su historia. Todo por decidir y una ciudad, Milán, que acogió a un sinfín de madrileños en un día tan especial.
Madrileños por el Mundo, como no podía ser de otra manera, viajó hasta la ciudad italiana para vivir junto a nuestros madrileños esta jornada para la historia.