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La pubertad es una de las etapas más complejas del desarrollo humano. Durante estos años, los adolescentes experimentan no solo transformaciones físicas, sino también un importante proceso de reorganización cerebral conocido como poda neuronal.

La coach Joana Fernández explica que “la cabeza de los adolescentes es como una casa que está en reformas y ellos están viviendo dentro”. Una metáfora que refleja perfectamente el caos emocional y conductual que caracteriza esta fase.

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Según Fernández, “la corteza prefrontal, que es la parte del cerebro encargada de tomar decisiones, está aún a medio construir, mientras que el sistema límbico, responsable de las emociones, está a pleno rendimiento, como si estuviera de fiesta”. Esta descompensación explica, en gran medida, la impulsividad y la falta de control propias de la adolescencia.

Para ayudar a padres y educadores a mejorar la comunicación con los jóvenes, la coach propone una metodología sencilla y práctica que denomina “EVITA”:

  •  E: Escucha con atención.
  •  V: Valida sus emociones.
  • I: “I”, del inglés I (yo), fomenta la comunicación desde la experiencia personal.
  • T: Tiempo, elige el momento adecuado para hablar.
  • A: Alternativas, no órdenes.