Un año sin soluciones: la lucha de un matrimonio en Malasaña contra las humedades

Hace un año, Rocío y Orlando, un matrimonio que ha vivido 35 años en un piso de la EMVS en Malasaña, se enfrentaron a un problema que ha convertido su hogar en un auténtico infierno: goteras y humedades. Un año después, la situación no solo no ha mejorado, sino que se ha agravado considerablemente.

"Estamos desde el año pasado que vinieron a hacer una chapuza y fue todo lo que hicieron", expresa frustrado Orlando. La situación es alarmante. Según él, tras hablar con un ingeniero, le confirmaron que el problema radica en las tuberías. "Hubo un señor que tenía el problema de Diógenes; una señora vino a hacer unos arreglos y dejó algo abierto arriba. Desde ese momento, empezaron nuevamente las humedades", relata.

Las goteras no solo han afectado al baño, sino también a la cocina y al salón. Rocío comparte su preocupación: "Mi miedo ya no es solo eso, sino que vuelva a ir al trazo de luz y eso te dé un chispazo o cualquier cosa". La humedad se está extendiendo cada vez más, generando incluso "pompas de agua" en las paredes.

A pesar de haber comunicado la situación varias veces al Ayuntamiento, no han recibido respuesta efectiva. "Tenemos la reclamación donde dice claramente: humedades en el techo del baño y en la cocina. Llevo cinco fotos y estos documentos reposan allá en la empresa", asegura Orlando. "Por mucho que lo vuelvan a pintar, volverá a pasar lo mismo si no lo solucionan", añade Rocío con resignación.

La situación ha tenido repercusiones graves en su salud. Orlando revela: "A mí me han mandado un inhalador y esto es de por vida". Por su parte, Rocío menciona problemas respiratorios: "A mí me ha cogido en el pecho y en la garganta. Somos bastantes mayores como para que estén jugando con nuestra salud".

El matrimonio hace un llamado urgente para que tomen en serio su situación y realicen las reparaciones necesarias para erradicar las humedades de su hogar. Su salud y bienestar dependen de ello.