Javier Cortés Fuentes es un torero madrileño, natural de Getafe. Desde muy pequeño manifestó su deseo de ser matador de toros y estuvo apuntado a la Escuela Taurina de Madrid. Vivió una época muy intensa de novillero, siendo triunfador en el certamen de novilladas nocturnas en la plaza de toros de Las Ventas. Tras tomar la alternativa en el año 2010, estuvo sin vestirse de luces cerca de seis años, pero eso no minó sus ganas de alcanzar el triunfo.
En la corrida goyesca del 2018 consiguió una oreja tras una reveladora faena de gran nivel a un toro de la ganadería La Reina, faena en la que recibió una cornada grave de 20 centímetros en el muslo, pero que le sirvió para congraciarse con el público madrileño y ganarse un hueco en el corazón de los aficionados.Su momento más trágico lo firmó sin duda el 15 de septiembre de 2019, en la plaza de Las Ventas. Con las cámaras de TeleMadrid como testigo, el toro “Golfo” de la ganadería del Marqués de Albaserrada cambió para siempre la vida de Javier aquella tarde, infiriéndole una tremenda cornada que provocó el estallido en el globo ocular derecho, perdiendo una parte del iris y el cristalino y con ello, prácticamente la totalidad de la visión.
El doctor David Antolín nos explica con detalle el estado en el que entró Javier Cortés al hospital, cómo fue la intervención de urgencia y cómo ha sido el desarrollo posterior y el restablecimiento de toda la zona afectada, así como la posible situación futura de su visión.
La recuperación de esa cornada, que sigue su proceso, ha sido emocionalmente muy dura, con periodos de muchas dudas e incertidumbre, además de tremendamente dolorosa, pero el coraje y valentía del torero se han hecho palpables una vez más, mostrando una entereza y fuerza de voluntad inigualables para hacer frente a este percance.
Asistimos con él a la plaza de toros de Cenicientos y somos testigos de cómo se enfrenta a su primer toro después del fatal incidente, y podemos comprobar que, pese a su visión mermada, su concepto de toreo clásico y sus cualidades taurómacas siguen intactas, así como su confianza, sus ganas y su lucha para alcanzar el sueño. Arropado por buena parte de su cuadrilla, entre los que se encuentran los toreros de plataJosé Antonio Prestel y Antonio Molina, por su mozo de espadas, José Berrocosa y por un amigo íntimo, Israel Pascual, Javier Cortés nos cuenta cómo ha vivido este largo periodo, todos sus sentimientos y pensamientos más profundos y personales, y cómo ha conseguido salir adelante, manteniendo el ánimo y la actitud positiva en todo momento.
En un paseo por algunos de los sitios más emblemáticos de la ciudad de Madrid, su ciudad, Javier Cortés nos muestra su lado más humano y, como Virgilio, nos lleva con él a través de sus propios infiernos para caminar hacia la luz del nacimiento de un nuevo hombre y un nuevo torero