Vídeo: Redacción | Foto:Telemadrid
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Es el protagonista con el que lleva semanas hablando nuestro reportero Alberto, y eso que estar en contacto no siempre ha sido fácil, se trata del periodista Jorge Said, atrapado en Kabul.

Su cámara nunca se apagó y ahora quiere que el mundo vea lo difícil que ha sido salir del horror

Este profesional de la comunicación no solo ha conseguido huir de Afganistán llegando hasta España, sino que ha logrado mostrar cómo está siendo el duro camino de muchos afganos que intentan escapar del infierno talibán.

La caída de la capital a manos de los talibanes se precipitó y a este periodista le pilló grabando uno de sus documentales, pero su cámara nunca se apagó y ahora quiere que el mundo vea lo difícil que ha sido salir del horror.

En las imágenes captadas por el chileno vemos cómo cientos de personas se agolpan en un foso de aguas fecales en las inmediaciones del aeropuerto de Kabul, desde donde intentan buscar una salida.

“Gracias a usted por ayudar a estas chicas porque les ha salvado la vida a las tres”

Los militares custodian esta zona que separa a los ciudadanos afganos apenas 200 metros de los aviones que están partiendo rumbo a España. Hasta este punto llega Jorge acompañado de tres chicas jóvenes que quieren huir y, tras localizar a los miembros del Ejército español, finalmente, consiguen acceder al aeropuerto y subir al avión que les lleva rumbo a nuestro país.

Y justo antes de embargar, el periodista habla con uno de los militares para agradecerle el que les hayan sacado de allí a lo que se escucha como respuesta: “Gracias a usted por ayudar a estas chicas porque les ha salvado la vida a las tres”.

“Hasta el último día de la grabación de mi documental yo entrevisté al director de la televisión afgana y también a la presentadora que, al día siguiente, le llega una nota notificándole que ya no puede trabajar nunca más y menos en televisión exponiendo su cuerpo de mujer físicamente”, nos ha contado Jorge Said.

El periodista tuvo que ir modificando su ubicación a la par que camuflarse con la vestimenta para evitar ser descubierto por los talibanes.

“El último día tuve miedo y por eso cubría mi cara con un pañuelo”, ha afirmado Said.