Se firma el pacto regional por la Cañada Real. Es un intento de Comunidad, ayuntamientos afectados y delegación del gobierno por solucionar la situación del mayor poblado chabolista de Madrid
La Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid negociarán un convenio para comenzar "a corto plazo" a desmantelar el sector VI de la Cañada Real Galiana, en el que se encuentra el área más conflictiva, y que tiene "afecciones urbanísticas insalvables, a las que se unen la ausencia de condiciones mínimas de habitabilidad y los problemas derivados del tráfico y consumo de drogas.
Este compromiso se enmarca dentro del Pacto Regional por la Cañada Real Galiana que ha firmado este martes la presidenta regional, Cristina Cifuentes, la delegada del Gobierno en Madrid, Concepción Dancausa, los alcaldes de Madrid, Coslada y Rivas Vaciamadrid y los portavoces de los cuatro grupos de la Asamblea de Madrid, un Pacto que es fruto del consenso y
En su intervención tras firmar el Pacto, la presidenta regional ha destacado que por primera vez se ha aprobado un acuerdo con el consenso de todas las Administraciones implicadas, de los grupos políticos de la Asamblea, de las asociaciones vecinales y de las entidades sociales que trabajan en el asentamiento.
Además, ha subrayado que este Pacto será de obligado cumplimiento para las distintas administraciones públicas implicadas, "con independencia de los cambios políticos que se produzcan durante todo el periodo de tiempo que abarquen las actuaciones que se van a poner en marcha en la Cañada".
El Pacto Regional por la Cañada Real Galiana se estructura en ocho apartados generales y siete anexos, todos ellos con la premisa fundamental de garantizar el derecho a la vivienda a todos los habitantes de la Cañada que cumplan los requisitos previstos, como estar censados antes de diciembre de 2011. Para quienes no estuvieran en el censo en esa fecha, existe el compromiso de estudiar la posible celebración de un convenio marco que ofrezca una solución residencial.
Las medidas recogidas en esta hoja de ruta son aplicables a un tramo de la Cañada Real de unos 14,2 kilómetros de longitud, con una extensión de 107 hectáreas, que discurre en su mayor parte por el municipio de Madrid, pero también implica a los ayuntamientos de Coslada y de Rivas Vaciamadrid. Según el último censo, en la zona viven cerca de 7.300 personas en unas 2.500 viviendas. Además, también hay comercios e industria.