No se trata de una red de captación, sino de presuntos miembros del aparato logístico del DAESH y de un grupo vinculado a Al Qaeda. Se les acusa policialmente de formar parte de la estructura logística de organizaciones yihadistas, suministrando material logístico a zonas ahora mismo en conflicto.
Según ha explicado el ministro del interior, Jorge Fernández Díaz, los detenidos enviaban material a Siria e Irak camuflado como ayuda humanitaria. El cabecilla de la célula dirigía un complejo empresarial que le permitía el envío de material sin levantar sospechas en contenedores que tenían su punto de partida en puertos españoles.
Según fuentes de la investigación a los arrestados se les sigue la pista desde el año 2014 cuando comenzaron a realizar labores de adoctrinamiento y captación en puntos de nuestro país. La operación continúa abierta.