El clima de tensión en Gibraltar se apacigua tras la conversación telefónica entre el presidente del gobierno Mariano Rajoy y el premier británico David Cameron.
Los dos mandatarios hablaron ayer por la mañana y se comprometían a trabajar juntos.
La conversación telefónica ha permitido acercar posiciones. España y El Reino Unido están más cerca de cerrar este conflicto diplomático desatado tras las acciones unilaterales del peñón como la colocación de bloques de cemento en la bahía de Algeciras.
Los protabonistas de ese contacto telefónico: David Cameron preocupado y Rajoy que califica de inaceptables las últimas actitudes de Gibraltar.