En las últimas semanas se han publicado diversos estudios que nos van dando una idea de algo que a priori parece lógico: en espacios cerrados la probabilidad de estar en contacto, y con mayor intensidad, con el SARS-CoV-2 es mucho mayor que al aire libre. Por ejemplo, uno de estos trabajos, realizado en Japón, indica que el riesgo de contagio es hasta 19 veces más alto en espacios interiores.
Leonor Antolín, profesora de Medicina Preventiva de la Universidad CEU San Pablo y jefa del servicio de dicha especialidad en el grupo HM Hospitales, explica en Fórmula Salud cómo pasar este verano diferente.
Entre otras cuestiones conviene no olvidar que el virus sigue con nosotros y por lo tanto será prioritario mantener las medidas de lavado continuo de manos con agua y jabón, usar la mascarilla y mantener la distancia física de un metro y medio de seguridad.