Francisco Javier tiene una pancreatitis crónica desde hace 5 años y al menos una vez al mes sufre una crisis y acaba ingresado en el hospital de Torrejón de Ardoz con fuertes dolores casi una semana. La última vez fue la semana pasada.
Desde el inicio de la pandemia cada vez que le tienen que ingresar le hacen una prueba para saber si es positivo o no en coronavirus. Pero aunque no lo sea no le dejan salir de la habitación en la que se encuentra ni para dar un paseo.
Cambiar el protocolo Covid
Se queja de que el protocolo Covid que se siguen en Hospital de Torrejón le impida hasta asomarse por la puerta a pesar de que ya no hay tanta incidencia ni tantos ingresados por coronavirus en los hospitales.
“La atención de las enfermeras y de todo el mundo en el hospital es buena – dice a Buenos Días Madrid- lo único es que cuando tienes que estar cinco o seis días ingresado es muy duro. No me dejan dar ni un paseo por el pasillo y por la noche tienes ansiedad”.
Depresión y ansiedad
Dice que “me imagino que tiene que haber protocolos un poco fáciles, una planta que no tenga Covid, otra que tenga. Lo que digo es que es muy duro estar ahí solo, psicológicamente te quedas muy tocado ahí solo. Dejan sólo dos horas de una visita rápida y te quedas casi peor”
Además, dice que antes le ponían el suero y las medicinas cada 8 horas y ahora es cada 24 para tener menos contacto con las enfermeras. Afirma que cuando está ingresado lo que desea es irse y que la semana pasada cuando se empezó a encontrar un poco bien le dijo a su doctora que si podía darle el alta voluntariamente para seguir el tratamiento en casa y estar en el hospital porque no aguantaba más tiempo allí encerrado y estaba cogiendo una depresión.
Cree Francisco que deberían poner a los positivos en un ala distinta de los negativos para poder salir de las habitaciones y permitir a los familiares pasar el mayor tiempo posible con ellos.
