Hace un par de años Telemadrid fue testigo de la desesperación de Carmen y Antonio, un matrimonio en el que ambos son sordos, porque iban a perder su casa. Efectivamente, fueron entonces desahuciados porque avalaron el préstamo hipotecario que uno de sus hijos solicitó a Bankia.
Un alquiler frente al desahucio
Ocurrió que el hijo no pudo afrontar los pagos y el banco se quedó con el piso. Dos años después, la historia ha dado un giro sorprendente: Un juzgado de Parla ha acreditado que el hijo engañó a los padres y ha anulado el préstamo bancario.
Por fin, y después de la larga batalla judicial, han recuperado su piso. Cabe recordar que en este caso, que tuvo repercusión mediática, Bankia no siguió adelante con el desahucio y les dejó seguir en el piso con un alquiler asequible.
Un piso acondicionado a su discapacidad
Con todo, la familia siguió batallando en los juzgados hasta que ahora un juez ha anulado el préstamo hipotecario. Con ello hace posible también que el banco les devuelva el dinero del alquiler cobrado.
Hay que tener en cuenta que el piso de este matrimonio, aunque humilde, es más que un piso ya que lo tienen acondicionado a su discapacidad auditiva. Por ejemplo, cuentan con un sistema de luces para saber cuándo les llaman a la puerta.
Su hijo no ha vuelto a verles
Por ello, marcharse de su barrio en Parla habría sido una completa desgracia para ellos. Como ancianos necesitan seguir viviendo en su barrio de toda la vida, donde les conocen.
Telemadrid ha estado con ellos y con su hijo mayor, quien ha contado los detalles de esta historia. De su otro hijo, el que los engañó con el aval del préstamo, los padres añaden el dolor de no saber nada de él, pues ni siquiera volvió a verles ni se ha interesado por ellos en todo este tiempo.
