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Comienza la campaña de poda en Alcalá de Henares. Hay 1.300 actuaciones previstas para los próximos días. en todos los distritos de la ciudad, incluyendo calles, parques, zonas verdes, colegios públicos y otros edificios municipales. Objetivo: preservar, cuidar y garantizar la seguridad del arbolado urbano. Se trata de retirar ramas secas y de preservar la salud y el desarrollo de los árboles al tiempo que se garantiza la seguridad para las personas y los bienes.

"Cada árbol tiene un seguimiento individualizado para detectar enfermedades", señala el concejal de Medio Ambiente, José Vicente Pérez Palomar en el programa Buenos Días Madrid. "Trabajamos también en la seguridad vial, eliminando ramas que impiden ver las señales de tráfico y subiendo el gálibo de los plátanos para no entorpecer la circulación", explica.

El concejal indica que "hay dos épocas del año en que no es recomendable podar: cuando sale la hoja y cuando la está perdiendo. Los plátanos de sombra todavía tienen vigor a estas alturas, por eso estamos podándolos ahora", añade.

CUIDAR LOS ÁRBOLES, CUIDAR LA CIUDAD

Estas intervenciones se realizan conforme a los estándares europeos de Arboricultura y siguiendo las recomendaciones técnicas de los especialistas municipales, quienes planifican las actuaciones según las necesidades específicas de cada árbol, atendiendo a factores como la especie, edad, ubicación y estado fitosanitario.

La planificación de los trabajos se ha estructurado por zonas de actuación, abordando calles completas o tramos definidos, con el fin de optimizar los recursos y minimizar las molestias a la ciudadanía.

Las podas se ejecutan de acuerdo con las prescripciones del contrato de mantenimiento de zonas verdes y arbolado urbano, y siguiendo los principios de la Arboricultura moderna, que prioriza la conservación del árbol y su adaptación al entorno urbano.

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Las principales intervenciones incluyen:

• Retirada de ramas secas, rotas o con deficiencias estructurales o fitosanitarias.

• Eliminación de ramas bajas que interfieren con el tránsito peatonal, el tráfico rodado o la señalización viaria.

• Formación y conducción de la copa en arbolado joven para garantizar un crecimiento adecuado.

• Reestructuración y equilibrado de copas en ejemplares consolidados que han perdido su estructura natural.

• Actuaciones de mejora estética y de seguridad, respetando siempre la biología y fisiología del árbol.Cada intervención se adapta al tipo de especie, su forma y ubicación, asegurando una poda responsable y respetuosa con el equilibrio del ecosistema urbano.Inspección integral de zonas verdes y viarios.

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El arbolado urbano de la ciudad —que supera los 60.000 ejemplares— constituye un patrimonio natural de gran valor, complementado por los árboles de los espacios naturales, como el entorno del río Henares o el Monte de Utilidad Pública “Los Cerros”.