Todos nos hemos levantado un poquito o un muchito más desanimados. La derrota de la selección española, que supuso nuestra eliminación del mundial, ha sentado muy mal. Sobre todo porque no se tiene la sensación de que se haya puesto toda la carne en el asador, y ni siquiera de que hayamos tenido mala suerte.
Sólo de que hemos hecho un mal papel, por no decir papelón, y de que no hemos estado a la altura. El seleccionador, Fernando Hierro, que fue nombrado in extremis un par de días antes del debut de la selección, ha querido asumir así la culpa.
Tertulia con Vicente Olaya y Carlos Dávila.