Un medicamento para aliviar los síntomas del embarazo provocó una auténtica tragedia en toda Europa. A pesar de todo, en España el medicamento siguió comercializándose doce años después de conocer sus efectos. Han pasado ya muchos años, pero los afectados por la talidomida, no han dejado de luchar.
Una lucha nada sencilla que ha logrado sus frutos en países como Alemania o Austria donde, gracias a un acuerdo en el que intervino el Estado, los afectados reciben desde los años 70 entre 1.500 y 7.000 euros de ayuda, dependiendo del grado de afectación.
En España los afectados por este medicamento no han encontrado más que obstáculos en su lucha, y ahora acaban de sufrir un nuevo revés, al haber sentenciado el Tribunal Supremo que los afectados de la talidomida no podrán cobrar sus indemnizaciones al estimar que el delito ha prescrito.
Cualquier tarea cotidiana, como cocinar, vestirse o peinarse, supone un reto para cientos de personas que nacieron con malformaciones de diferentes grados de gravedad. Pero no están dispuestos a rendirse y prometen que continuarán luchando para que se haga justicia.