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Aunque no hay registros oficiales, asociaciones como la European Network of Home Education calculan que entre 2.000 y 4.000 familias españolas educan a sus hijos en casa. En España la educación es obligatoria entre los 6 y los 16 años y la responsabilidad de escolarización recae sobre los padres o tutores legales.

Sin embargo, la enseñanza en familia está contemplada por el Ministerio de Educación para casos específicos - feriantes, artistas o deportistas de élite -, pero no como una alternativa al modelo de escolarización.

Los procesos que se han abierto han obligado a algunas familias a que escolaricen a sus hijos, pero no ha habido en ningún caso una retirada de custodia, pero hay dificultades añadidas, por ejemplo, como se homologan las titulaciones cuando se ha estado estudiando, pero en casa.

“En el caso de España la educación es un derecho y una obligación y debe ser llevada a efecto en el ámbito educativo normalizado, es decir, en la escuela”, explica Javier Urra en Newtral, primer Defensor del Menor en Madrid. Añade “que la Fiscalía podría interpretar que se impide el derecho del niño o que se pone en riesgo, y terminar quitando la tutela a los padres”.

Países anglosajones, Francia y Portugal, más laxos en el ‘homeschooling’

El rechazo a esta alternativa del homeschooling en España puede darse, en ocasiones, porque se confunde el derecho a la educación del menor con el derecho a estar escolarizado. Así lo explica Jorge Sánchez-Taragaza, profesor de derecho de la Universidad Europea de Valencia y asesor de la Asociación por la Libre Educación (ALE): “En España se identifica la educación con la escolarización obligatoria, no así en los países anglosajones, en Francia o en Portugal”.

Este abogado insiste en la importancia de diferenciar entre niños que están desprotegidos y niños detrás de los cuales hay “un proyecto educativo consciente y deliberado”.

Alejandro Muñoz, padre ‘homeschooler’ y miembro de la Asociación por la Libre Educación, tiene una niña de 8 años que educa en casa. La hija va aprendiendo según sus necesidades e intereses, todo esto es variable ahora mismo realizan mediante una plataforma 15 minutos de Matemáticas y 15 de Lengua al día.

“Cada familia puede elegir el sistema para sus hijos en cada momento, la socialización es importantísima, pero no solo se concibe en la escuela. Igual que los adultos no solo socializamos en el trabajo”, cuenta a 120 Minutos.

La educación en casa supone 365 días de trabajo al año las 24 horas del día y se basa en la motivación intrínseca del niño por aprender”.