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Entramos en la Unidad de Cuidados Intermedios del hospital Infanta Sofía. Una zona a medio camino entre estar en planta y recalar en la UCI. Precisamente todos los esfuerzos de los profesionales que trabajan en esta unidad están encaminados a evitar que los pacientes, desgraciadamente, se vean obligados a ingresar en la Unidad de Cuidados Intensivos.

Pacientes sedados para soportar el umbral de dolor

Hablamos con una de las doctoras que trabaja en esta unidad tan fundamental. Nos cuenta que los pacientes están parcialmente sedados para “poder soportar el umbral del dolor”. Se trata de pacientes totalmente dependientes del personal sanitario, que no pueden recibir visitas familiares, a no ser que el fallecimiento sea inminente.

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“Los pacientes tienen mucho miedo y el estar medio sedados les permite tolerarlos”. La doctora nos explica lo duro que resulta comunicar malas noticias a las familias. Y también sufren el impacto emocional de atender a estos pacientes tan vulnerables, algunos de los cuales fallecen. “A veces pasamos con ellos dos o tres meses y realmente somos su familia”, nos cuenta.

Ahora esta profesional espera que nuestro reportaje sirva para concienciar a los jóvenes de los riesgos y dramáticas consecuencias del coronavirus.