El 32,6% de los hombres cree que forzar a su pareja para mantener relaciones sexuales no supone una violación, según se desprende de un estudio elaborado por la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género y que concluye que dos de cada diez hombres normaliza abusar de una mujer por vestir de forma "provocativa".
Lo que supondría 3 de cada 10 hombres.
En el caso de las mujeres, el porcentaje se reduce a un 24,1%, aunque implica que casi una de cada cuatro no se siente violada si su pareja la presiona para tener sexo en contra de su voluntad, tal y como señala el informe 'La percepción social de la violencia sexual'.
Además, cerca del 60% considera que la ley no debe entrar en si un hombre besa a una mujer sin su consentimiento porque, aunque sea algo reprobable, no debe ser castigado, según las cifras que maneja el informe.
Entre las conclusiones del estudio, la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género señala que las generaciones más jóvenes muestran más rechazo que los mayores hacia el sexismo, mientras que a mayor nivel formativo y cultural, más capacidad para identificar realmente lo que es una situación de acoso o abuso sexual.
Aunque la mayoría de los encuestados (2.465) condena la violencia sexual, cuando se pregunta por el ámbito de la pareja o abusos que no implican sexo como tal, aumenta el porcentaje de personas que lo justifican o que al menos piensan que no debe estar castigado.
En cuanto a los 'piropos' o comentarios de tipo sexual a mujeres con las que no se guarda relación, el 23,1% cree que debería ser siempre castigado por la ley y cuentan con el rechazo del 86% de las personas entrevistadas.
"Aunque la inmensa mayoría de la población condena la violencia sexual, cuando se pregunta por comportamientos de violencia sexual que no implican relaciones sexuales o cuando estas relaciones se enmarcan en el ámbito de la pareja, disminuye de forma sustancial el porcentaje de personas que consideran que estos comportamientos deben estar siempre castigados", señala el estudio.