La exposición al humo del tabaco ha bajado un 90 por ciento en los no fumadores tras la aplicación de las leyes de control del tabaquismo, según un estudio de la Unidad de Control del Tabaco del Institut Català d'Oncologia (Ico) y del Institut d'Investigació Biomèdica de Bellvitge (Idibell).
Al medirse la concentración de cotinina -sustancia derivada de la nicotina que se usa como marcador- en la saliva de los encuestados se ha observado que ha disminuido cerca de un 90 por ciento de 2004 a 2012, ha informado este martes el Idibell.
La ley 28/2005, en vigor desde enero de 2006, prohibía parcialmente el consumo en público, y cinco años después -enero de 2011- se puso en marcha la segunda ley del tabaco -42/2010-, que ampliaba la prohibición en todo tipo de locales cerrados como bares y restaurantes, y en algunos espacios al aire libre, como recintos hospitalarios.
Los investigadores detectan diferencias importantes en la percepción que los no fumadores tienen de su exposición al tabaco antes y después de estas leyes, puesto que ha disminuido un 36,5% en espacios públicos y un 15 por ciento en casa, lo que significa que los fumadores que no pueden fumar en lugares públicos también han restringido el consumo en el ámbito privado.
En 2004 en todo el mundo la exposición de no fumadores al tabaco fue responsable de 379.000 muertes por enfermedad cardiaca isquémica, 21.400 muertes por cáncer de pulmón; 165.000 por infecciones respiratorias y 36.900 por asma en todo el mundo; y en España, provocó 1.228 muertes por cáncer de pulmón y 3.237 por enfermedad cardiaca isquémica.