Hay niños que nacen con un pan debajo del brazo y otros...con una raqueta de ping-pong. Al menos eso es lo que ha ocurrido al pequeño Jamie Myskova-Budell de Plymouth, Estados Unidos.
Este bebé de tan solo 18 meses ha aprendido antes a darle a la raqueta de ping-pong que a caminar. Su vídeo en tan solo 3 días ha recibido más de 100.000 visitas. Habrá que estar pendientes de su evolución. Desde luego si sigue así su derecha mortal dará que hablar.