La ayuda humanitaria de España a los países más necesitados ha caído un 85% desde 2009, hasta quedarse en 46,6 millones de euros, lo que supone un euro por ciudadano cuando el mundo se enfrenta a la mayor crisis humanitaria desde la II Guerra Mundial.
Así lo asegura Oxfam Intermón en la última edición de su informe 'La realidad de la ayuda', presentado este martes en un acto en Madrid por José María Vera, director general de esta ONG, junto con Fernando García Casas, secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica, y Marta Iglesias, representante de la Junta de la Coordinadora para el Desarrollo-España (Congde).
El informe indica que la ayuda oficial al desarrollo de España continúa "en caída libre" con un descenso del 73,5% desde que la crisis económica comenzara en 2008, hasta bajar al mínimo histórico del 0,12% de la Renta Nacional Bruta (RNB).
De hecho, estas partidas han acumulado seis años de recortes hasta caer una tercera parte y descender a niveles de los años 90. Así, la ayuda oficial al desarrollo pasó de 4.762 millones de euros de 2008 a 1.261 millones en 2015, lo que representa un descenso acumulado del 73,5%.
Además, España es el país donante de la OCDE que más ha visto caer su esfuerzo en este capítulo desde que la crisis económica comenzara en 2008, con datos incluso peores que Grecia o Portugal.
Vera señaló que la política de cooperación española se encuentra "ante el borde del abismo", por lo que urgió a una "refundación" en el marco de una legislatura en la que los responsables del Gobierno muestran "predisposición hacia el diálogo", con lo que abogó por más fondos en los Presupuestos Generales del Estado.
"Es difícil caer más", indicó Vera, al tiempo que apuntó que España ocupa el puesto 26º de los 28 países donantes del Comité de Ayuda al Desarrollo (CAD) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), sólo por delante de Eslovaquia y Polonia.
Vera destacó que la situación es más grave en el presupuesto destinado a acción humanitaria porque ha descendido un 85,4% desde 2009, hasta situarse en 46,6 millones de euros en 2015, lo que equivale a un euro por español, cuando más de 128,6 millones de pesonas en el mundo se encuentran en una necesidad de ayuda de emergencia y la ONU ha afirmado que el planeta vive ahora la mayor crisis humanitaria en 70 años.
"SEÑAL ESPERANZADORA"
Por otra parte, Vera apuntó que las ONG afrontan un "agotamiento de las capacidades" por no atender todas las necesidades, algo que no ocurría desde "hacía décadas", al tiempo que "nunca se había llegado a una brecha tan grande para cubrir los llamamientos humanitarios de Naciones Unidas".
Comentó que el Gobierno aseguraba hasta 2014 que esa situación se debía a la crisis económica y se comprometió a recuperar los niveles de ayuda oficial al desarrollo cuando la economía española recuperase la senda del crecimiento. "Hay un crecimiento económico, pero se sigue castigando estas políticas", añadió.
Sin embargo, Vera apuntó que hay "una señal esperanzadora" porque la ayuda oficial al desarrollo de comunidades autónomas y ayuntamientos ha aumentado en los dos últimos años, pero indicó que la Agencia Española de Cooperación al Desarrollo (Aecid) sólo gestiona un 15,7% de los fondos.
Por su parte, Fernando García Casas admitió que hay que "luchar" por aumentar la ayuda oficial al desarrollo porque actualmente cuenta con "recursos escasos" y apuntó que el Gobierno trabaja para alinearse con la Agenda 2030 aprobada por la ONU, que incluye Objetivos de Desarrollo Sostenible a cumplir hasta 2030, y para elaborar el quinto plan director de la cooperación española.
"Estamos haciendo un esfuerzo comprometido y denodado por mejorar la calidad. Espero que podamos tener pronto buenas noticias respecto de la cantidad", comentó, después de comentar que el Gobierno intenta captar fondos de la UE y está presente en los "foros relevantes", indicó.
Por último, Marta Iglesias mostró un "doble sentimiento" de "preocupación" por la situación de la ayuda oficial al desarrollo de España y de "esperanza" de que esta situación cambie, porque "el punto de partida no puede ser peor, sólo nos queda mejorar".
Iglesias indicó que "España está ahora mismo a la cola de la UE" en ayuda oficial al desarrollo y tiene "poca capacidad para hacer cooperación estratégica", porque primero debe cumplir compromisos financieros ante la organismos internacionales.
Además, recalcó que esa tendencia de reducción de fondos contrasta con el apoyo ciudadano a estas políticas, puesto que, según el Eurobarómetro, España es el segundo país de la UE con más aceptación popular a la cooperación y, según un informe de la Congde, casi 2,4 millones de personas apoyan a las ONG.