El actor estadounidense Will Smith cuenta "la verdad" de los daños cerebrales que ocasionan los continuos golpes que sufren los jugadores de fútbol americano en la película dirigida por Peter Landesman "Concussion", que se estrena en Estados Unidos el día de Navidad.
Smith presentó hoy la película en Nueva York con, entre otros, el hombre al que interpreta en el filme, Bennet Omalu, el médico que descubrió hace unos años las consecuencias para el cerebro del fútbol americano y se enfrentó a la persecución de la liga estadounidense (NFL) por ensombrecer a un deporte que en ciudades como Pittsburg, donde transcurre la película, es casi una religión.
"El fútbol es maravilloso. Esta película no es contra el fútbol sino sobre contar la verdad", explicó Smith a los periodistas, a quienes reconoció que esta temporada no ha visto ningún partido porque no puede "evitar" no dejar de fijarse en los golpes.
Smith dijo haber recibido "más llamadas de las que hubiera imaginado" de jugadores y familias que le dan las gracias por hacer la película.
El actor, que se dio a conocer por la serie "El príncipe de Bel-Air", confesó haberse preocupado en primera persona por los efectos de las contusiones ya que su hijo ha practicado ese deporte durante cuatro años.
No es la primera vez que Smith se pone en la piel de un "héroe vivo americano" tras encarnar al boxeador Mohammed Ali en "Ali".
Ridley Scott, uno de los productores del filme, enseguida tuvo claro que quería llevar a cabo la película y contar para el protagonista con Will Smith, apuntó en la rueda de prensa su esposa, Giannina, también responsable de la producción del filme.
Smith tuvo la oportunidad de preparar el personaje entrevistándose con el propio Omalu, con el que existe una química evidente, el cual le invitó a presenciar algunas autopsias en su quirófano para ver cómo trabaja.
"Omalu llama pacientes, no cadáveres, a las personas que tiene ante sí. Se preocupa por ellas y les habla", contó Smith, que ha reproducido los gestos y manías del médico en la gran pantalla para dar más verosimilitud al personaje.
El verdadero protagonista de esta historia de David contra Goliat halagó el trabajo de Smith y aseguró que al ver la película transcurridos cinco minutos dejó de ver al famoso actor para verse a sí mismo.
Cuando en los años noventa Omalu llamó la atención de los daños cerebrales provocados por el fútbol (CTE, en las siglas en inglés), la NFL y los grandes medios de comunicación le echaron en cara que un nigeriano viniera a manchar el nombre del fútbol, un deporte sin el que no se puede entender la cultura estadounidense.
Aunque no reconoce que sea por sentimiento de culpa, Omalu, que consiguió la ciudadanía estadounidense el pasado mes de febrero, no escatima en piropos hacia su país de acogida.
"Creo que solo en la tierra de los sueños, en el lugar donde todo es posible, se ha podido llevar a cabo esta película", apuntó el doctor, que se reconoció un hombre muy "espiritual" y dejó claro que para él "fe y ciencia no tienen porque ser contradictorios".
Landesman no es nuevo en películas que ponen en jaque al poder establecido, pues ya dirigió anteriormente "Kill the Messenger", sobre la persecución de la Casa Blanca contra un reportero que denunciaba el papel de la CIA armando a los rebeldes en Nicaragua.
El director dijo que su formación como periodista le empuja a "la búsqueda de la verdad, el gran argumento también en Concussion" y añadió que para el guión, que también es obra suya, se basó en el artículo publicado en GQ Magazine por Jeanne Marie Laskas "Brain Game".