La edad media de las personas que inician tratamientos para superar su adicción al alcohol o las drogas aumenta de año en año y se sitúa ya en 38,3 años, según los datos del Observatorio de Proyecto Hombre correspondientes a 2016. En general, ese informe confirma las tendencias de años anteriores -el primero se hizo en 2012- en cuanto al perfil "socializado" de los adictos, su escasa percepción del riesgo de marginalidad o exclusión, la progresiva caída de las adicciones al alcohol -aunque sigue siendo la predominante- y subida de la relativa a cocaína y cannabis.