Rusia celebra este sábado la primera edición desde la Guerra Fría del festival internacional de la canción de Intervisión, una alternativa a Eurovisión tras la expulsión del país en 2022 por la guerra de Ucrania.
Creado en 1965 bajo los auspicios de la Organización Internacional de Radio y Televisión de Europa del Este, el certamen fue acogido por Bulgaria, la URSS, Polonia e incluso Finlandia.
Su última edición fue en 1980, celebrada en Sopot, en plena efervescencia de las protestas del sindicato Solidaridad en Gdansk. El Kremlin impulsa ahora esta versión renovada con un marcado componente político y cultural.
“Estos valores tradicionales están pasando a un segundo plano en la agenda internacional. Ya es hora de que vuelvan”, defendió Vladímir Putin, que en enero firmó un decreto para recuperar el festival comunista.
Por su parte, el ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, aseguró: “No habrá perversión ni vejación sobre la naturaleza del ser humano”, subrayando que el certamen busca música basada en el folclore de cada país y no en mensajes reivindicativos.
En esta primera edición tras su resurgir, Intervisión ha reunido a 23 participantes, entre ellos China, Bielorrusia, Serbia, India, Vietnam, varios países árabes y africanos, además de cuatro latinoamericanos: Brasil, Colombia, Cuba y Venezuela.
Estados Unidos estará representado por la australiana Vassy, que sustituyó en el último momento a Brandon Howard. El anfitrión ruso contará con Shamán, conocido como intérprete de la banda sonora de la guerra.
La colombiana Nidia Góngora, ganadora de dos Grammy, interpretará “En los Manglares” con la intención de que “cada frase sea la voz del Pacífico”.
La cubana Zulema Iglesias presentará “Guaguancó”, una muestra de “nuestras raíces, la cubanía, la esencia del cubano”.
El venezolano Omar Aceo defenderá “La Fiesta de la Paz”, mientras que el dúo brasileño Luciano Calazans y Thais Nader competirá con “Pipoca com Amor”.