Menos cafeína y azúcar y más deporte y frutos secos para alimentar la memoria son algunos consejos que expertos y educadores recomiendan a los miles de jóvenes que estos días preparan la nueva prueba de acceso a la universidad (PAU), mientras les recuerdan que nueve de cada diez aprueban.
El 91,7% del alumnado de segundo de bachillerato que se presentó a la PAU en 2024 aprobó y en la fase general, la obligatoria, el aprobado fue prácticamente del cien por cien, exactamente del 97,3%.
Son datos que profesores de bachillerato y educadores recuerdan al alumnado estos días con el objetivo de rebajar el estrés y la ansiedad que vive la mayoría de chicos y chicas.
"Hay que convencerles de que están suficientemente preparados para afrontar con garantías estas pruebas. Desde primero de bachillerato se les habitúa a ese modelo de preguntas", señala Javier Iglesias, presidente de la asociación Aesece, que representa a 141 centros de Bachillerato concertado.
Además, en la mayoría de institutos el alumnado realiza exámenes tres días seguidos del mismo modo a los organizados por la PAU, ya que el profesorado es consciente de que esta prueba dispara la ansiedad al ser unos exámenes en los que muchos alumnos ven "que se juegan su futuro".
Un calendario de estudio
Para el alumnado lo más importante es organizarse bien el tiempo de estudio.
Aunque inevitablemente muchos estudiantes opten por dejarlo todo para el final y estudiar al máximo los días previos a esta prueba tan importante, los educadores y psicólogos recomiendan hacer un calendario de estudio y dividir el temario en bloques y días.
Los esquemas, los mapas conceptuales, la priorización de contenidos clave e incluso el estudio en voz alta puede facilitar el aprendizaje.
Asimismo, los expertos aseguran que el espacio de estudio juega un papel ciertamente importante en este proceso de preparación. Un habitáculo ordenado, bien iluminado y libre de distracciones (evitando al máximo el móvil y las redes sociales) es clave para la concentración del estudiante.
No obstante, cabe destacar que cada alumno debe conocerse a sí mismo y, más allá de tener en cuenta estos consejos, estudiar de la manera más efectiva para sí mismo.
Alimentar la memoria
"No tengo un límite marcado de pausas de descanso, paro cuando me desconcentro, salgo de mi habitación, me doy un paseo por la casa y voy a la cocina a comer algo", señala Victoria, estudiante de PAU del Instituto público Fortuny de Madrid, que refleja el 'modus operandi' de la mayoría de sus compañeros.
Sin embargo, la alimentación en época de exámenes tiene un papel crucial en el rendimiento, y educadores en Ciencias de la Salud alertan del abuso de cafeína, azúcares o bebidas energéticas para afrontar los exámenes.
"Producen efectos verdaderamente negativos porque les sobreestimula", advierte el orientador del Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid, Sergio Cook.
Consejos para mejorar la concentración
Con el objetivo de mejorar la concentración, la focalización en el estudio y la retención de información, los expertos recomiendan determinados alimentos.
El pescado azul y los frutos secos para agilizar la rapidez mental; el queso y la carne para prevenir la fatiga; el chocolate negro para mantener la mente más despierta y los huevos y cereales con el fin de aportar energía al cerebro.
Además, a esta alimentación hay que sumarle ocho horas de sueño al día y, recomendablemente, algo de ejercicio o meditación para relajar la mente.