La Audiencia de Sevilla ha prorrogado hasta el 13 de febrero de 2019 la prisión provisional de Miguel Carcaño, condenado a veinte años de cárcel por el asesinato de la joven Marta del Castillo, mientras se resuelven los recursos de casación ante el Tribunal Supremo.
En un auto al que ha tenido acceso Efe, la Sección Séptima de la Audiencia recoge que la larga duración de la pena impuesta "por sí sola justifica prorrogar la situación de prisión provisional hasta la mitad de la pena impuesta, es decir hasta diez años".
Ello es debido a que la larga duración de la condena conlleva un "riesgo evidente" de "fuga y de sustraerse a la acción de la justicia en caso de conceder la libertad provisional", dice la Audiencia.
Por ello, el tribunal que condenó a Carcaño ha decidido ampliar su situación de prisión provisional hasta los diez años, ya que el joven fue detenido el 13 de febrero de 2009, tres semanas después de la desaparición de Marta del Castillo.
Previamente, en un breve acto desarrollado ante el tribunal, el fiscal ha argumentado que trata de "dar respuesta a la sociedad" y ha dicho que es la medida lógica dado que, previsiblemente, la condena será ratificada por el Tribunal Supremo.
Carcaño se ha conectado mediante videoconferencia desde la cárcel de Morón de la Frontera (Sevilla) y únicamente ha intervenido para declarar que respaldaba lo que defendiera su abogada, Paloma Pérez Sendino.
Esta, por su parte, ha admitido la ampliación a diez años dado que es lo previsto por la ley y posteriormente ha declarado a los periodistas que "confía en el recurso" que ha planteado al Supremo para que los hechos sean calificados como homicidio, lo que rebajaría la condena a una franja de entre diez y quince años.
Paloma Pérez ha explicado a los periodistas que la videoconferencia es un proceso normal dada la distancia de la cárcel de Morón y, al mismo tiempo, por la necesidad de que el reo esté presente al tratarse de "una medida restrictiva del derecho fundamental a la libertad y que debe hacerse con todas las garantías".
La prisión provisional de diez años es la mitad de los veinte que le impuso la sentencia dictada el pasado 13 de enero, y se adoptará a la espera de que el Supremo resuelva sobre los recursos planteados por las acusaciones y defensas.
La Fiscalía ha anunciado que pedirá al Supremo que Carcaño sea condenado también por un delito contra la integridad moral de los padres de Marta, que pague los 616.000 euros que costó buscar el cadáver en el Guadalquivir y luego en un vertedero y que la condena se amplíe a su hermano Francisco Javier Delgado y a su amigo Samuel Benítez como encubridores.