Más de un centenar de personas han asistido hoy en absoluto silencio a la misa del niño de 6 años que ayer fue atropellado por una carroza de la cabalgata de los Reyes Magos de Málaga minutos después de que hubiera comenzado su recorrido.
Los restos mortales del menor han sido acompañados desde la iglesia donde se ofició la misa hasta el tanatorio por familiares, amigos y autoridades, entre ellas el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre.
Los padres también han sido arropados en todo momento por numerosos profesionales del ámbito judicial debido a que el padre es un reconocido forense de los juzgados malagueños.
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha explicado a los periodistas que la cabalgata cumplía todas las medidas de seguridad pero que no se descarta instalar vallas protectoras en el recorrido de la cabalgata como hacen otras ciudades.
Además, ha subrayado que las investigaciones se están desarrollando y que mañana se conocerá el atestado policial.
Por último, Francisco de la Torre ha indicado que en estos momentos lo más importante es arropar a los familiares del menor.
Por otra parte, en la cuenta oficial del Ayuntamiento de Málaga en Twitter se asegura que las primeras diligencias de la Policía Local sobre el accidente de la cabalgata no podrán remitirse al juzgado hasta mañana.
El Ayuntamiento de Málaga ha declarado dos días de luto (hoy domingo y mañana lunes) y se han suspendido todos los actos oficiales y las banderas ondean a media asta.
Se han suspendido todos los actos públicos municipales durante estos dos días, entre otros las cabalgatas organizadas por los distritos municipales de Ciudad Jardín, Palma Palmilla y Teatinos, previstas para hoy.
El atropello mortal se produjo a la altura de la Plaza del General Torrijos, poco tiempo después del inicio del itinerario de las carrozas por diversas calles del centro de la capital malagueña, aunque la cabalgata no se suspendió por motivos de seguridad.
La carroza contaba con las medidas seguridad precisas, según apuntó el Consistorio, y la vigilancia de quince personas, doce de ellos voluntarios acreditados, dos de protección civil y un policía local.
El accidente, según testigos presenciales, se produjo en la plaza General Torrijos cuando el pequeño intentaba coger caramelos arrojados por una de las primeras carrozas del cortejo y se metió debajo de las ruedas de la carroza para coger uno.
El grupo de investigación de accidentes de la Policía Local está íntegramente dedicado en la investigación de los hechos, ya han tomando imágenes, declaración a los testigos presenciales y han efectuado mediciones.
La carroza ha sido trasladada a un depósito municipal por si son necesarias nuevas pruebas.