El español Pablo Marí, jugador propiedad del Arsenal pero cedido en el Monza italiano, recibió este domingo el alta hospitalaria después de ser apuñalado en la espalda el pasado jueves por la noche y operado el viernes para reducir el daño muscular causado.
"Pablo Marí recibió esta mañana el alta hospitalaria, volvió a casa y ahora comienza un periodo de reposo absoluto", informó el Monza mediante un comunicado.
Marí, que se encontraba junto a su pareja y su hijo, fue atacado por un italiano de 46 años con problemas mentales que apuñaló a otras cinco personas, una de las cuales, un empleado del supermercado Carrefour, falleció mientras era trasladado al hospital.
El autor del ataque, identificado como Andrea Tombolini y que estaba siendo tratado por problemas mentales, explicó que sintió "envidia", al ver "a toda esa gente feliz", al fiscal que lleva el caso y que ha decretado su internamiento de forma cautelar.
Retenido el agresor por otro futbolista
Según los medios locales, el agresor fue detenido gracias a la intervención del exjugador de fútbol Massimo Tarantino, que militó en Bolonia, Inter y Nápoles, que consiguió inmovilizarlo hasta la llegada de la policía.
Después de ser operado para reducir el daño muscular causado por el ataque, el futbolista aseguró que tanto él como su familia estaban "bien a pesar de las circunstancias" y agradeció "todos los mensajes de apoyo".
"Además, queremos enviar el pésame y toda nuestra fuerza a los familiares y amigos de la persona fallecida, y deseamos de corazón que todas las personas heridas se recuperen lo antes posible", añadió el valenciano.
Marí no podrá volver a los entrenamientos hasta, al menos, dentro de dos meses.