La primera mujer al frente de la Guardia Civil en sus 175 años de historia, María Gámez, ha prometido este miércoles "trabajo, diálogo y respeto" y, tras declararse "feminista", se ha fijado como reto impulsar la incorporación de más mujeres a la institución y hacer "más grande aún" al cuerpo.
"Soy feminista y creo en la igualdad de hombres y mujeres", ha defendido Gámez en la sede central de la Guardia Civil durante su toma de posesión, presidida por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y a la que finalmente no ha acudido la ministra de Defensa, Margarita Robles.
Ante la cúpula de Interior y del Instituto Armado, María Gámez ha destacado que espera no ser la última mujer al frente de la institución, que cuenta en sus filas con 5.840 mujeres guardias, un 7,6 por ciento. "Es una cifra claramente insuficiente y debe crecer, no podemos conformarnos. A la Guardia Civil le va a sentar muy bien que puedan llegar más mujeres", ha enfatizado antes de pedir ayuda a todos los agentes para conseguir hacer "más grande" aún a la Guardia Civil.
Gámez ha recordado que la presencia de la Guardia Civil en toda España es una de sus grandes "fortalezas", sin olvidar otras señas como su capacidad para abordar peligros globales como el crimen organizado, el terrorismo o la ciberdelincuencia, sin dejar de lado su prestigio internacional. No se ha olvidado de la misión de la Guardia Civil en la protección del medioambiente del que es "pionera" o en la salvaguarda en el mar. "Ayudáis a que muchos salven su vida y a otro a evitar que la pongan en riesgo", ha elogiado.
La nueva directora se ha referido también a la violencia machista, "esa lacra que nos avergüenza a todos" y a las capacidades de las fuerzas de seguridad para tratar de erradicarla. Unos retos que Gámez ha dicho asume con "decisión y mucha responsabilidad" para "con ayuda de todos "dar un renovado impulso" para hacer "más grande aún a la Guardia Civil".
De la nueva responsable política del cuerpo, el ministro del Interior ha destacado su enorme capacidad. "Tienes dotes para el liderazgo y eres dialogante". Como Gámez, Marlaska ha defendido el despliegue territorial del cuerpo que asegura la presencia del Estado en todo el país y ha recordado que 2.000 pequeñas unidades en esa "España despoblada" son la garantía que un servicio de "máxima calidad".