La oposición carga contra el consejero catalán de Interior por su incompetencia para proteger a los diputados de los 'indigand

  • Lamentan la imagen de "debilidad" que dieron ese día las instituciones catalanas

La oposición ha cargado este jueves contra el conseller de Interior, Felip Puig, por su falta de previsión e incompetencia para proteger de las agresiones a algunos diputados en el bloqueo del Parlament durante el pleno de Presupuestos el 15 de junio por parte de los autodenominados 'indignados', y han lamentado el ataque a la institución y al sistema parlamentario.

Durante la comparecencia de Puig en la Comisión de Interior, el diputado del PSC Joaquim Llena ha recriminado al conseller dicha "incompetencia reiterada" para garantizar la seguridad y el orden público, y la falta de previsión porque la voluntad de bloqueo del pleno no era una acción sorpresa En esta misma dirección ha ido Oriol Amorós (ERC), para quien el conseller conocía la presencia de violentos y no lo previó bien, aunque todavía no ha hecho autocrítica.

Amorós ha lamentado la imagen de "debilidad" que dieron ese día las instituciones catalanas y la humillación de que los políticos fueran en helicóptero y furgones policiales.

Temen que la agresividad "se puede contagiar"

Llena ha recriminado al conseller que la agresividad "se puede contagiar" y que eso es lo que se consiguió con la actuación policial en plaza Catalunya el 27 de mayo, logrando cambiar el tono y los objetivos del movimiento y radicalizarlo.

En una intervención muy dura pero sin pedir la dimisión de Puig aunque sugiriéndola --"Si fuera responsable de unos hechos tan graves como estos, yo habría renunciado por dignidad al cargo"--, Llena ha lamentado la imagen de las instituciones y ha considerado que a Puig le ha pasado lo peor que le puede pasar a un responsable de Interior: "Fracasar a la hora de garantizar la seguridad de las personas y las instituciones".

Pere Calbó (PP) ha tachado de error la "desprotección" de los diputados desde el coche en que llegaron a los aledaños del Parlament hasta la línea policial que les debía proteger, y de negligencia el no haber dado instrucciones claras para asegurar un acceso seguro, aunque ha recordado que los culpables son los violentos con una actitud totalitaria.

Ha pedido al conseller que lleve ante la Justicia a los culpables de los altercados y a los convocantes de la acción, y que haya una "tolerancia cero" ante la violencia y además ha aprovechado para pedir que se ponga fin a las acampadas.

ICV pide la dimisión de Puig

En las antípodas, Jaume Bosch (ICV-EUiA), el único que ha pedido a Puig que dimita, le ha recriminado que desde que empezó el movimiento 15M no entiende nada, y ha lamentado que insulte a muchas personas pacíficas con su criminalización del colectivo: "Nadie culpa al Bara si en las celebraciones aparecen algunos violentos".

No ha querido sumarse a quienes criticaban el dispositivo del 27 de mayo en plaza Catalunya por ser muy duro y al del boicot al Parlament por ser blando, porque cree que si el día 27 no se hubieran encendido los ánimos y se hubieran hecho bien las cosas no habría sido necesario el dispositivo del día 15 de junio.

Bosch, que ve a Puig prisionero de su visión ideológica de la seguridad, le ha imaginado llevar a los Mossos d'Esquadra hacia el precipicio diciéndoles que son fabulosos y le ha advertido de que la policía catalana no necesita a nadie que "le haga la pelota" sino órdenes claras, lógicas y sensatas.

Tanto ICV-EUiA como ERC han recriminado la falta de experiencia en materia de seguridad de Puig y el director general de los Mossos, Manel Prat, y han reclamado responsables más experimentados más allá de tener "carné de partido".

Para Alfons López Tena (SI), que ha querido ser más "ecuánime", el dispositivo fue eficaz para garantizar el pleno del Parlament y evitar que se extendiera la violencia a otros puntos de la ciudad, pero no pudo garantizar la integridad de los diputados.

Así, ha acusado a Puig de mandar a los diputados a un "linchamiento colectivo" en el acceso a la cámara catalana, y ha opinado que si se pudo celebrar el pleno fue por azar.

Le ha preguntado por qué unos pudieron ir en helicóptero y otros tuvieron que acudir al "campo de refugiados" de la estación del Nord, donde fueron acompañados en furgones.

En declaraciones a Europa Press, Jordi Cañas (C's) ha lamentado que Puig haya dado justificaciones y no explicaciones, destacando que "se bordeó la tragedia porque la sensación es que envió a los diputados al matadero", y le ha acusado de mentir porque no notificó al líder de C's, Albert Rivera, la posibilidad de utilizar el helicóptero.