El sindicato USCA ha vuelto a acusar este jueves a AENA de incumplir "el acuerdo de mínimos" firmado entre ambas partes el pasado 13 de agosto, tras la retirada de la amenaza de huelga en agosto por parte del colectivo, y aseguró que continúan inmersos en un conflicto "complejo" con AENA que todavía "no se ha resuelto" y que más bien se ha convertido en "un problema".
En rueda de prensa en Madrid, el secretario de Comunicación de USCA, César A. Cabo, aseguró que "hoy por hoy" el ente "no está cumpliendo a rajatabla" con lo acordado y denunció que AENA no abona los atrasos de las retribuciones, incumple los turnos de descanso, no publica con antelación las jornadas y no facilita las configuraciones de trabajo de referencia.
Según reveló Cabo, AENA realizó una transferencia de un céntimo de euro a los 2.400 controladores en plantilla en concepto de atrasos el pasado 13 de septiembre, lo que calificó de "una tomadura de pelo" y de una "gota más" en la falta de respeto hacia el colectivo. Además, afirmó que la media del sueldo de un controlador no es "ni de lejos" los 200.000 euros anunciados.
"Visto lo visto, no está nada claro, sigue habiendo un problema y no acabamos de ver la buena voluntad de AENA de querer avanzar en la línea que marcó Fomento", señaló, aunque añadió que USCA está dispuesta a resolverlo por la "vía del diálogo".
Cabo considera que tras el encuentro con el ministro de Fomento, José Blanco, el pasado 3 de septiembre, que pese a llegar tarde supuso un "punto de inflexión" y se desarrolló en una actitud cordial, la compañía "falta a la palabra del ministro", ya que éste se comprometió a resolver la situación con el diálogo e incluso a estudiar la posibilidad de flexibilizar la retirada de la actividad a los 57 años.
"La credibilidad política de Blanco queda en entredicho con la actitud de AENA", opinó Cabó, quien cree que existe "un problema de comunicación" entre Fomento y el propio ente.
"SI NO HAY RESPUESTA, HABRA REACCION SINDICAL"
Tras insistir que USCA siempre ha cumplido con lo pactado con AENA desde el año 1999 hasta 2010, Cabo insistió en que el colectivo "no se plantea recurrir a ninguna medida de presión como puede ser una huelga", aunque matizó que es un derecho de todo trabajador al que no renuncian 'sine die'.
De hecho, de cara al 29 de septiembre, cada controlador decidirá libremente si la secunda o no, pero en cualquier caso se cumplirá con los servicios mínimos.
Preguntado por la posibilidad de que la negociación, que se prevé se reanude la próxima semana, no avance hasta Navidad, advirtió que "si no hay una respuesta, habrá una reacción sindical", ya que no van a consentir que se firme un pacto y éste no se cumpla. No obstante, no se marcan plazos, aunque insisten en continuar con la negociación "cuanto antes".
Por su parte, el portavoz Daniel Zamit, que calificó el acuerdo de "un parche" que ha permitido a los controladores descansar entre cinco y seis días al mes, afirmó que esta situación "no se puede prolongar por ser insostenible".
Desde USCA insistieron en que falta plantilla, por lo que no entienden como AENA no ha llamado a trabajar a los 47 controladores que salieron en julio de la promoción de la escuela de Senasa, que comenzó a formarse en 2006. "Llevan cuatro años formándose y dos meses en sus casas esperando a incorporarse mientras se hacen horas extras", aseguraron.