Los pilotos de Air Europa, compañía propiedad del grupo Globalia, pararán todos los lunes y jueves a partir del próximo 22 de septiembre y con carácter indefinido, anunció en rueda de prensa el jefe sindical del Sepla en la aerolínea, Luis Crespi. "Hemos solicitado la autoridad laboral el ejercicio de derecho de huelga", que ya ha sido presentada esta mañana ante la Dirección General de Trabajo, confirmó el presidente del Sepla, Javier Martínez de Velasco, quien aseguró que el sindicato ha tenido que convocar estos paros para defender los derechos del colectivo.
Crespi explicó que la convocatoria de huelga obedece a las externalización "progresiva" de su producción hacia otras compañías y a que Air Europa ha venido mostrando desde hace un año "su más absoluto desprecio" hacia el colectivo al no informar de sus planes empresariales. Según Sepla, la "inmensa mayoría" del colectivo de pilotos de Air Europa, formado por unos 550 efectivos, han respaldado la convocatoria de huelga. Según sus cálculos, los paros podrían afectar a entre 180 y 200 vuelos diarios.
Crespi informó de que el colectivo tenía intención de convocar los paros antes del verano, pero alegó que en un "ejercicio de responsabilidad" y por respeto a los clientes, se ejerce el derecho a la huelga pasado el periodo estival, consciente de que es la "ultima opción" que les queda. "Apelamos a la comprensión de los clientes de Air Europa y pedimos disculpas anticipadas quienes se puedan ver afectados por esta huelga", recalcó.
ABIERTOS A NEGOCIAR
Los pilotos quieren encontrar cuanto antes una vía de solución al conflicto, para causar "el menor transtorno posible" y afirman estar abiertos a las negociaciones con los representantes de la aerolínea. "Una compañía puede ser rentable sin renunciar a la calidad y al servicio a los mas altos estándares de seguridad", aseguró Crespi. "La huelga es consecuencia de más de un año de desencuentros con la empresa", aseveró el portavoz, quien aseguró que Globalia ha ido progresivamente "vaciando de contenido" la aerolínea a través de la externalización de sus vuelos hacia otras compañías, "una práctica prohibida por el convenio colectivo cuando se hace sin el consenso de la sección sindical, como es el actual caso", denunció.
Crespi también acusó a los responsables de Air Europa de "boicot sindical" al ocultarle información "clave" para la vigencia del convenio colectivo, e incluyó entre las razones de la huelga el "acoso laboral" al que está siendo sometido el colectivo en los últimos meses, con "presiones y sanciones" que, según explicó, "violan el procedimiento establecido en el convenio".
Según aseguró, dicha campaña de acoso a los pilotos podría "condicionar su independencia" a la hora de tomar decisiones relativas a la seguridad de los vuelos. Los pilotos sufren presiones para que sobrepasen la normativa legal de las operaciones y se ha llegado a degradar a dos comandantes al puesto de copilotos "por negarse a trasgredir los límites de tiempos de trabajo y descanso establecidos por la normativa".
AIR EUROPA, EN "GRAVE PELIGRO"
El responsable recordó que en diciembre del año pasado se pactaron los códigos compartidos con la aerolínea del grupo Orizonia, Orbest, hacia los destinos de Cancún y Punta Cana al entender los pilotos que esto permitía racionalizar las operaciones. No obstante, en mayo de este año "de manera unilateral y sin el acuerdo con la sección sindical" la empresa extendió el acuerdo con Orbest a los vuelos entre Canarias y la Península, una práctica, que según Crespi, "no solo viola lo establecido en el convenio colectivo sino que amenaza el futuro nuestros puestos de trabajo", además de poner en duda el "prestigio" de Air Europa.
Según el portavoz, estos acuerdos forman parte de un "plan estratégico" que busca dejar el contenido de la aerolínea en terceras compañías para realizar la producción de Globalia que hasta ahora tenía que hacer Air Europa.
"Air Europa por si sola sin Globalia carece de valor y podría estar en grave peligro", advirtió Crespi, quien recordó que el convenio colectivo vincula a la aerolínea con su matriz, y que aseguró tener constancia de un acuerdo comercial "de gran calado" con Orizonia --firmado el pasado mes de noviembre--, que incluía además de estos códigos compartidos otros aspectos que la empresa "se ha negado a compartir" con el colectivo de pilotos y que afectan a la producción de Globalia, "la cual según nuestro convenio solo puede realizarse con Air Europa salvo que exista un acuerdo con nuestra representación", explicó.
Además, recordó que el subdirector general de Air Europa "en recientes declaraciones" afirmó "claramente" que Globalia está inmersa en un cambio de modelo de compañía y estableciendo fórmulas para que la producción de medio radio la opere otra empresa. "Han aparecido informaciones sobre venta o intercambio accionarial entre ambos grupos", reiteró Crespi, quien señaló que a pesar de las demandas de Sepla, la compañía se ha negado a informar y a reunirse con el colectivo para resolver el conflicto.
SERVICIOS MINIMOS
Crespi reiteró que el colectivo está abierto a las negociaciones y señaló que lo que pretende es que se le informe sobre el rumbo que toma la compañía, que se pacte con los pilotos la situación, además del cese del acuerdo de código compartido con Orbest o con cualquier otra aerolínea que no hayan sido acordados con los pilotos.
Asimismo, reclaman que finalicen las presiones sobre los comandantes y que Air Europa tenga una "actitud leal" en cuanto a la situación del convenio y las prórrogas acordadas anteriormente. En cuanto a los servicios mínimos, Crespi espera que se apliquen los mismos que los fijados por CCOO y UGT en la anterior huelga del sector aéreo, aunque hay que esperar a ver que dice al respecto el Ministerio de Trabajo.
