El PP busca en las elecciones del domingo cerrar el círculo virtuoso que empezó en 2009 y teñir prácticamente de azul todo el mapa autonómico, aunque el PSOE está convencido de que no le será tan fácil y confía en conservar Andalucía e incluso reconquistar Asturias, aunque sea con la llave de IU.
Con su triunfo en Galicia en marzo de 2009 el PP comenzó una carrera victoriosa que le ha llevado desde entonces a vencer en las elecciones europeas y a barrer prácticamente del mapa al PSOE en las autonómicas y municipales de mayo del año pasado, preludio de la victoria aplastante de Mariano Rajoy en las generales del 20N.
Si el PP gana también en Andalucía y se coloca en una buena posición en Asturias, habrá completado la mejor etapa de su historia, mientras que el PSOE habrá tocado suelo, aunque el naufragio total podría llegar el año que viene, si también pierde la única autonomía en la que todavía gobierna: el País Vasco.
En el PP, tanto nacional como andaluz, no quieren dar por hecha la mayoría absoluta en Andalucía que le dan algunas encuestas sobre intención de voto publicadas en los últimos días, prevenidos ante el hecho de que un exceso de confianza deje a potenciales abstencionistas en casa el 25M y al final tengan una sorpresa en las urnas.
Fuentes del PP de ámbitos nacional y andaluz han corroborado que, según sus propios estudios, es ahora más probable una victoria por mayoría absoluta que un triunfo "insuficiente", o lo que es lo mismo: está más cerca un resultado por encima de los 55 escaños.
Por contra, los socialistas están seguros de que van a dar la campanada y, aunque son prudentes y no descartan que el PP sea la lista más votada en Andalucía, creen que Javier Arenas se quedará lejos de la mayoría absoluta, lo que le abre la puerta a José Antonio Griñán para seguir al frente de la Junta.
Ahora bien, son conscientes también de que, si se da ese caso, lo más seguro es que tengan que lidiar con IU, y no se olvidan de que esta fuerza política le puso la zancadilla a Guillermo Fernández Vara en Extremadura y permitió, con su abstención, el gobierno de José Antonio Monago, del PP.
Y ello sin contar con la posible irrupción de UPyD en el Parlamento andaluz, lo que podría llegar a convertir en determinante al partido de Rosa Díez en el caso de que a Arenas le faltase uno o dos diputados para la mayoría absoluta.
Igual de incierta es la situación en Asturias, donde todas las encuestas pronostican que ningún partido conseguirá los escaños suficientes como para formar gobierno en solitario, máxime con el antecedente de Francisco Álvarez Cascos con el Foro Asturias, cuyo mandato en minoría ha dudado siete meses.
El PSOE prevé que la lista que encabeza Javier Fernández sea la más votada y confía en aumentar sus actuales 15 diputados y acercarse a la veintena, lo que desbrozaría el camino para volver a pactar con IU.
Los cálculos de las fuentes consultadas en Génova sitúan a la candidatura de Mercedes Fernández como la tercera opción en número de votos, e incluso consideran factible un acuerdo de gobierno con Foro Asturias a pesar de la incomunicación con Cascos.
Izquierda Unida tiene bastantes expectativas en Asturias y en Andalucía y se ve incluso con posibilidades de decidir los próximos gobiernos, con lo que la federación que lidera Cayo Lara consolidaría una "buena racha" después de que en las últimas generales pasara de dos a once diputados.
Aliarse con los socialistas, en el caso de que los resultados lo permitieran, sería la decisión natural de IU, aunque después de lo sucedido en Extremadura ni siquiera el propio Lara se atreve a asegurar con rotundidad que esta fuerza apoyará al PSOE, al ser una decisión que, según él, compete exclusivamente a las federaciones territoriales.
Mañana viernes todos ellos estarán en Sevilla para echar el cerrojazo a la campaña, e incluso Rubalcaba y González también visitarán Córdoba con antelación.
RAJOY Y RUBALCABA COINCIDIERON ESTE JUEVES EN ASTURIAS
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha ofrecido hoy a los asturianos "el comienzo de una nueva etapa que suponga la vuelta a la normalidad con un gobierno que gobierne, tome decisiones y adopte las reformas que precise" al margen de enfrentamientos.
"No venimos a disputar con nadie; somos una fuerza que gobierna en casi toda España y Europa y que tiene la fortaleza para coger el toro por los cuernos, sin discutir con nadie, que solo sirve para crear mal ambiente, que es justo lo que no se necesita", ha añadido.
Rajoy ha participado en un hotel de la localidad costera de Ribadesella en una comida-mitin con 250 simpatizantes y militantes del PP en la que también ha intervenido su candidata a la Presidencia de Asturias, Mercedes Fernández, "Cherines".
En su segundo acto electoral en menos de una semana en Asturias -el pasado sábado participó en el mitin central de la campaña en Oviedo-, el presidente ha asegurado que el PP ofrece "solvencia, serenidad, sensatez, transparencia, cuidar el dinero y siempre decir la verdad".
En vísperas de que se cierre la campaña electoral, y en una jornada en la que vuelve a coincidir en Asturias con el líder de los socialistas, Alfredo Pérez Rubalcaba, Rajoy se ha mostrado convencido de que el PP "va a liderar el cambio de gobierno del Principado, que es lo que necesita la comunidad y España.
Rajoy ha puesto de relieve que en 34 años de democracia del país, ésta va a ser al primera vez en la que se repitan unas elecciones a los siete meses de haberse celebrado las anteriores y que, según el presidente, han dado como resultado "un año perdido de gobierno".
Previamente, Cherines había afirmado que Rajoy lidera el cambio de este país con "compromiso, decisión y las reformas que se necesitaban, ha asegurado que en estas elecciones Asturias se juega el futuro.
A un día de finalizar la campaña, Cherines también ha pedido a los electores que a la hora de votar recuerden que los socialistas fueron quienes "trajeron 100.000 parados, corrupción y deudas en los cajones".
Rajoy tiene previsto visitar esta tarde las instalaciones que sidra "El Gaitero" tiene en Villaviciosa, donde a partir de las 19:30 horas participará en otro mitin junto a "Cherines" y el alcalde de la localidad, José Manuel Felgueres, que encabeza la lista del PP por la circunscripción oriental.
RUBALCABA PIENSA QUE CASCOS Y RAJOY SE PELEAN POR MANDAR
El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha advertido hoy de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el jefe del Ejecutivo, Francisco Álvarez-Cascos, "piensan lo mismo, dicen lo mismo y votan lo mismo" y únicamente se pelean en Asturias "por el poder, por ver quién manda".
En el mitin central de la campaña del PSOE en Asturias celebrado en el Palacio de los Deportes de La Guía ante unas cinco mil personas, Rubalcaba, convencido de la victoria socialista en el Principado el próximo domingo, ha advertido que PP y Foro "son exactamente lo mismo" como demostraron al apoyar la reforma laboral.
"Cascos le dice a Rajoy: En Asturias mando yo, y Rajoy le dice a Cascos: No, mando yo. Y yo les digo que en Asturias mandan los asturianos que son quienes les van a mandar a la oposición el próximo domingo", ha enfatizado el líder del PSOE, que ha estado acompañado por el expresidente del Gobierno, Felipe González.
Según Rubalcaba, frente a dos derechas, Foro y PP, a las que no les ha costado trabajo ponerse de acuerdo para aprobar "una ignominiosa reforma laboral que la izquierda nunca va a aceptar", el PSOE presenta a estas elecciones en Asturias a Javier Fernández, "el mejor" candidato posible al que ha definido como "serio, seguro y solvente".
Así, ha acusado a Rajoy, que hoy también se encuentra en Asturias, no tener ministra de trabajo "sino de propaganda" y ha lamentado que el Gobierno no tenga reparo en hablar de transparencia en alusión a la ley que mañana aprobará el Consejo de Ministros, "cuando ocultan los Presupuestos Generales del Estado".
Rubalcaba, que ha calificado de "desgobierno" los ocho meses de gestión de Álvarez-Cascos, ha advertido de que Asturias es "una tierra espectacular" que, ante una situación de crisis, lo que menos necesita son "políticos que estén todos el día dando espectáculo" y sí un "buen gobierno" con un presidente "en el que se pueda confiar".
Además, ha asegurado que González y Fernández son dos de los socialistas a los que más admira y ha rememorado la situación en la que el PSOE se encontró España en 1982 para compararla con la actual crisis económica y advertir de que, ya entonces, se hablaba de la necesidad de abaratar el despido y reducir el estado del bienestar.
En aquella situación, ha apuntado, el PSOE supo "resistir" a la ideología dominante de Margareth Thatcher o Ronald Reagan apostó por la sanidad, la educación y las pensiones públicas y consiguió convertir a España en una de las potencias económicas del mundo.