El juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez Bermúdez ha ordenado el ingreso en prisión de los seis piratas somalíes detenidos el pasado 10 de octubre cuando supuestamente intentaban secuestrar el atunero vasco "Izurdia", que navegaba a unas 350 millas de la costa de Somalia. Gómez Bermúdez, que imputa a los seis detenidos un delito de piratería, ha adoptado esta decisión a instancias del fiscal Jesús Santos tras tomarles declaración a lo largo de la mañana, han informado fuentes jurídicas.
Los seis presuntos piratas han negado los hechos y han alegado en su defensa que no tenían intención de abordar al atunero sino que buscaban a una persona que había caído al agua, aunque el juez no se ha creído esta versión porque cuando fueron detenidos se encontraban a más de 220 millas de la costa, según las fuentes consultadas.
Tras su detención en Somalía, los seis presuntos piratas fueron trasladados a España el miércoles a bordo de un avión de la Fuerza Aérea Española, procedentes de Yibuti.
Los hechos se produjeron el pasado 10 de octubre, cuando el atunero vasco "Izurdia" fue atacado por un barco pirata a 350 millas de la costa de Somalia, agresión que pudo ser rechazada por las fuerzas de seguridad a bordo del buque.
El intento de asalto procedió de un esquife con seis individuos a bordo, pero los agentes de seguridad embarcados aplicaron el protocolo disuasorio en caso de ataque, con lo que se consiguió rechazar a los piratas, según explicó el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.
Tras lanzar la alerta de ataque, los piratas fueron capturados por un buque de la Armada holandesa, encuadrado en la OTAN, que a su vez los trasladó al buque de la Armada española "Castilla".
PENAS DE HASTA MÁS DE 1.000 AÑOS DE PRISIÓN
Se trata del tercer ataque a un barco español en aguas del Índico que llega a la Audiencia Nacional, ya que el juez Eloy Velasco investiga también el asalto al buque de la Armada "Patiño", ocurrido el pasado mes de enero.
Por esta causa procesó a seis supuestos piratas por 218 delitos de detención ilegal, uno de piratería en grado de tentativa, otro de desobediencia a buque militar para prevenir la piratería, una falta de daños y pertenencia a organización criminal con la agravante de elevado número de componentes y tenencia de armas.
Las penas con las que estos delitos están castigados van de los 893 años y tres meses de prisión hasta los 1.122 años y medio de cárcel.
Asimismo, otros dos piratas fueron condenados en mayo del año pasado por la Audiencia Nacional a 439 años de cárcel por el secuestro del atunero "Alakrana" en 2009, aunque en diciembre el Tribunal Supremo rebajó en 36 años las penas impuestas a Cabdiweli Cabdullahi, "Abdu Willy", y a Raageggesey Hassan Aji para dejarlas en 403.