El exvicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra ha cargado de nuevo contra los pactos del PSOE con partidos independentistas como Junts y ERC, incluyendo la amnistía debatida este martes en el Congreso, y ha asegurado que "la historia será muy dura con los que han propiciado este desbarajuste democrático".
En la presentación del libro 'No me resigno', de Nicolás Redondo, que ha sido expulsado recientemente del PSOE por sus críticas al partido, Guerra ha mostrado su rechazo a las alianzas suscritas por los socialistas para la investidura de Pedro Sánchez, sin llegar a nombrar expresamente al presidente del Gobierno ni a su partido.
Entre otros asuntos, ha criticado la proposición de ley de amnistía, que precisamente este martes ha pasado su primer filtro en el Congreso con su toma en consideración y que, según Guerra, es un "disparate" que no servirá para mejorar la convivencia sino al contrario.
Además, se ha preguntado "cómo podrá sobrevivir una democracia abandonada por los poderes públicos e indefensa ante la posible repetición de la secesión, rebelión o golpe de Estado" de los independentistas catalanes, y ha hecho una advertencia con una alusión implícita al PSOE y a Sánchez.
"La historia será muy dura con los que han propiciado este desbarajuste democrático", ha añadido.
En su opinión, "las reivindicaciones nacionalistas nunca tendrán fin" y "su apetito insaciable está impidiendo que España tenga unas prioridades claras para el futuro", pero apunta al PSOE de nuevo por dar pie a estas demandas.
"Cuando el tiempo de los independentistas había pasado, llega el salvavidas de los acuerdos con el Gobierno", ha lamentado.
Guerra también ha criticado que "un reducido 1 % de la población" haya impuesto sus criterios "con la colaboración del poder ejecutivo", aunque ha pedido no caer en la "hipérbole" que utiliza el PP al asegurar que vivimos en una dictadura.
Y ha insistido en sus críticas a la ley de amnistía presentada por el PSOE, así como al uso de un mediador internacional procedente de El Salvador en la mesa constituida entre el PSOE y Junts en Ginebra (Suiza) y con la presencia de Carles Puigdemont para profundizar en los acuerdos tras la investidura.
"Si el chantaje se practica desde fuera del país fruto de la negociación de un forajido al que persigue la ley, hasta el ciudadano más alejado de la política se pregunta cómo es posible que las decisiones que afectan gravemente a la nación se estén imponiendo desde fuera del territorio nacional y bajo la vigilancia de un ciudadano americano", ha señalado.
Sobre la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), ha sostenido que la responsabilidad de este bloqueo no es del PP ni del PSOE sino de los "presidentes de las Cámaras", al tiempo que ha criticado a los populares por haberse "tragado" la tesis de los socialistas de que la culpa es de ellos.
Por su parte, Redondo ha comentado que es un día "triste" para él porque se ha iniciado el tramite de la ley de amnistía que, según ha advertido, es una norma que "no tiene nada que ver" con la ley de amnistía de 1977, ya que la actual "no es una ley de amnistía, es una ley de impunidad".
Asimismo, ha explicado que su libro no es una forma de resignarse ante el panorama político actual sino de rebelarse para tratar de "recuperar esta tradición política e ideológica del mejor PSOE".
"Si es posible, en el PSOE. Si no es posible, que lo hagan los que lo tengan que hacer", ha indicado.