La Fiscalía de la Audiencia Nacional se ha opuesto hoy a la entrega a Suiza del informático del HSBC Hervé Falciani, reclamado por robar de ese banco datos de cientos de miles de presuntos evasores fiscales, en atención a su colaboración en investigaciones de blanqueo y de financiación del terrorismo.
Según la fiscal Dolores Delgado, la información de Falciani ha servido para desvelar conductas que han podido contribuir no solo "a la crisis" económica, sino "a la vulneración de derechos de los ciudadanos" a los que se les han sustraído fondos públicos y por ello "no se le puede perseguir y España no le perseguiría".
Delgado, que hasta este momento no había hecho pública la posición de la Fiscalía en esta extradición, ha expuesto así en su informe final que no cabe su extradición al no cumplirse el requisito de la doble incriminación (que los delitos por los que se pide la entrega tengan su equivalencia en el ordenamiento español).
Esto es así, ha explicado, porque, si bien los delitos por los que Suiza pide la entrega pudieran ser equivalentes a los relativos a revelación de secretos, Falciani cumplió con su obligación de denunciar hechos delictivos conocidos en razón de su cargo.
"CUMPLIÓ CON SU OBLIGACIÓN", SEGÚN EL FISCAL
Falciani cumplió con esa obligación, según ha recordado la fiscal, ya que al conocer la falta de control en el HSBC, se dirigió a las autoridades judiciales helvéticas antes de abandonar Suiza en diciembre de 2008.
Otro dato llamativo para la fiscal es que el HSBC no ejercitó acciones contra Falciani hasta marzo de 2009, "coincidiendo con el inicio de su colaboración con las autoridades internacionales".
Esa colaboración también ha sido crucial para que la Fiscalía se haya opuesto a la extradición, ya que ha tenido en cuenta colaboró con las autoridades de distintos países como Francia, Italia, Estados Unidos y España, que "también se ha beneficiado", en la investigación de delitos de blanqueo, fraude fiscal o financiación del terrorismo.
De hecho, el ex secretario de Estado de Hacienda Carlos Ocaña, que ha prestado declaración como testigo de la defensa, ha indicado que gracias a la información de Falciani, que sacó a la luz la identidad de 659 defraudadores fiscales, se consiguieron regularizar en España 300 millones de euros.
Se trató de "la operación de regularización más cuantiosa que ha habido en esos años en el ministerio y creo que de la historia", ha asegurado.