El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha pedido a ETA "coherencia" con lo que llama "cese definitivo de la actividad armada y proceda a disolverse incondicionalmente, porque, de lo contrario, advierte, se hará "por las buenas o por las malas".
Así lo asegura el ministro en una entrevista en "El Mundo" recogida por Efe, en la que recalca que las fuerzas de seguridad no bajarán la guardia "en ningún momento" mientras la banda terrorista no se disuelva definitivamente, porque es una organización que "sigue existiendo".
El titular de Interior subraya además que el Gobierno "jamás" va a negociar con una organización terrorista porque "no hay absolutamente nada que negociar" y no tiene dudas de que el final de la banda se escribirá con "vencedores y vencidos".
"Los vencedores somos los demócratas y los vencidos los terroristas", apostilla Fernández Díaz.
Preguntado sobre cómo interpreta la ofensiva de Batasuna, el ministro sostiene que lo que no debe ocurrir es que lo que ETA no ha podido conseguir por la vía terrorista, otros lo vayan a conseguir ahora por vías políticas.
Añade que ahora las fuerzas políticas democráticas deben conseguir, una vez que los etarras han sido derrotados, quitarles los votos. "Debemos convencer a los vascos de que no voten a la izquierda abertzale en ninguna de sus manifestaciones".
El ministro señala que es evidente que ETA está utilizando al colectivo de presos vascos para sus fines y por eso mantendrán la dispersión y la reinserción individualizada.
"Sólo cuando ETA deje de existir la política de dispersión podrá replantearse", concluye.