El Gobierno elude pronunciarse sobre rebajas de condenas por delitos sexuales

  • Al ser preguntada la portavoz del ejecutivo, Isabel Rodríguez
La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez
La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez |TELEMADRID

La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha evitado pronunciarse este martes sobre la rebaja en las penas de algunas condenas por delitos sexuales tras las aprobación de la ley del sólo sí es sí, pero ha reiterado el compromiso del Ejecutivo en la lucha contra los discursos que amparan la violencia contra las mujeres.

En rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la portavoz del Ejecutivo ha afirmado desconocer estos pronunciamientos judiciales que han revisado a la baja las sentencias de algunos condenados tras la nueva tipificación de los delitos sexuales que ha introducido la ley orgánica de garantía integral de la libertad sexual.

Primeros casos en Madrid de rebaja de pena con la 'ley del sí es sí' de Irene Montero
Primeros casos en Madrid de rebaja de pena con la 'ley del sí es sí' de Irene Montero
Primeros casos en Madrid de rebaja de pena con la 'ley del sí es sí' de Irene Montero

Primeros casos en Madrid de rebaja de pena con la 'ley del sí es sí' de Irene Montero

"No he tenido oportunidad de leerlos, pero reitero el compromiso de este Gobierno con los avances en igualdad y con combatir las acciones que generan violencia sobre las mujeres y los discursos que amparan las acciones de violencia sobre las mujeres", ha destacado Rodríguez.

Ha lamentado la cifra de mujeres asesinadas por parte de sus parejas o exparejas y ha denunciado que son muchas las que tienen miedo a ser agredidas, al tiempo que ha llamado a combatir "este tipo de actitudes y discursos machistas".

La nueva tipificación de los delitos sexuales que introdujo la ley orgánica de garantía integral de la libertad sexual, conocida como "ley del sólo sí es sí", ha supuesto que los tribunales revisen a la baja las sentencias de algunos condenados.

Esta ley introdujo que todo acto sexual sin el consentimiento de la otra persona es una agresión, si bien también supuso la reducción de algunas penas mínimas. La pena mínima del delito de agresión quedó por ejemplo en cuatro años, frente a los seis contemplados anteriormente en el Código Penal.