La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha afirmado hoy que "invertir en defensa es invertir en seguridad" y ha apostado por una política en esta materia consensuada ante "el mundo de hoy, impregnado de populismo, intoxicaciones y propaganda que tratan de desestabilizar las sociedades de bienestar".
Cospedal ha comparecido hoy, por primera vez, ante la Comisión de Defensa de la Cámara alta para exponer las líneas generales de su departamento para esta legislatura. Ha ofrecido "voluntad de diálogo constructivo" por el interés común de las Fuerzas Armadas, la defensa nacional y el interés general del país.
"Sin consenso y apoyo no puede haber seguridad, sin seguridad no hay libertad y sin libertad no hay Estado de bienestar", ha asegurado Cospedal, quien ha ofrecido "mano tendida" para lograr un presupuesto estable y duradero.
Por ello ha planteado llegar a acuerdos de consenso para hablar de una ley o plan de sostenibilidad para la defensa nacional con el fin de evitar improvisar.
En su intervención, seguida entre los invitados por el jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), almirante general Fernando García Sánchez, y otros altos cargos de su departamento, Cospedal ha planteado que en esta legislatura se propone mejorar la capacidad de las Fuerzas Armadas, reforzar la posición de España en Europa, la OTAN y en la coalición internacional contra el Dáesh.
Ha defendido la complementariedad y autonomía de la UE y la OTAN, el refuerzo del vínculo estratégico con EEUU, ha avanzado que elabora un plan director de cultura de Defensa, ha reiterado el compromiso de España con las misiones internacionales y ha dicho que apoyará al Congreso en su ponencia para el estudio del régimen de tropa y marinería.
Tras señalar que "el mundo hoy está impregnado de populismo y propaganda" que pretenden desestabilizar las sociedades de bienestar, la ministra ha abogado por que en España se planee una política de Defensa y "saber hacia dónde quiere ir".
También ha recordado "un Gobierno responsable tiene la obligación de la Defensa, para que los ciudadanos puedan disfrutar de sus derechos, para garantizar la sociedad del bienestar y las estructuras económicas que mantiene esa sociedad del bienestar, y para garantizar la soberanía, la independencia y la integridad territorial".
Por otra parte ha indicado que hay que desterrar la idea de que la política de Defensa y Exterior son "gasto artificial y excesivo" y las políticas sociales son "garantía de solidaridad y progreso".
Se ha comprometido a alcanzar el 2 por ciento del PIB en inversión en Defensa en 2025, como se acordó en la cumbre de la OTAN de Gales, y ha confirmado que el presupuesto de su departamento para este año incluirá gastos atrasados a la industria de la defensa por programas especiales de armamento, que suman 1.824 millones de euros.