Cáritas: El 46% de los parados son de larga duración y están en peligro de exclusión

  • Las políticas de inclusión activa deben simultanear la garantía de ingresos, medidas de empleo y prestación de servicios de calidad

El 46% de los parados lleva más de un año buscando trabajo sin éxito, un 10% más que el año pasado, lo que agrava su situación personal y de peligro de exclusión, ha advertido hoy Cáritas. "Es el desempleo del desempleo, personas que llevan cuatro o cinco años buscando trabajo y que caen en la más profunda desmotivación, desestructuración personal y fractura social", ha advertido el secretario general de la organización, Sebastián Mora.

Prueba de este fenómeno de "desesperanza" es el hecho de que, en un año en que el desempleo ha seguido aumentando hasta afectar a casi 5 millones de trabajadores, el número de personas que ha pedido ayuda a Cáritas para encontrar empleo ha descendido en un 12 por ciento.

Mora ha destacado estas cifras en la presentación del informe de los Programas de Empleo de Cáritas en 2010 que revela que la organización asistencial de la Iglesia Católica ha atendido, asesorado y formado a 83.952 personas, de las que un 20% han conseguido un puesto de trabajo.

Mujer, inmigrantes, de entre 25 y 35 años y con un nivel básico de formación es el perfil más habitual de los desempleados que acuden a Cáritas en busca de ayuda. Así, datos de la organización revelan que el 65 por ciento son mujeres, un 70 por ciento son inmigrantes, y un 60 por ciento están entre los 25 y 45 años, "los años que deberían ser laboralmente más productivos", ha destacado Mora.

En total, han sido casi 84.000 personas las que han participado en los programas de ayuda al empleo de Cáritas, un 25 por ciento más que antes de que "explosionara la crisis", lo que ha supuesto una "saturación" de los servicios.

La organización, que ha invertido algo más de 33 millones de euros en acciones formativas como talleres laborales, cursos de formación ocupacional y talleres de corta duración a los que han asistido 11.625 personas.

Pese al descenso en el número de personas que ha solicitado ayuda, el presupuesto de Cáritas para programas de empleo ha aumentado en un 18 por ciento "porque la situación es cada vez más difícil y las personas necesitan más acompañamiento para no caer en la desesperanza", ha precisado Mora.

De los puestos de trabajo encontrados, la inmensa mayoría (16.791) ha sido gracias a la intermediación de Cáritas con empresas que han expresado sus necesidades específicas.

Otras 534 personas han encontrado empleo en alguna de las 21 empresas de inserción que tiene la organización en sectores como el reciclaje, la jardinería, servicios de limpieza o lavandería.

Además de analizar la situación actual y rendir cuentas de lo realizado, el informe de Cáritas también presenta una serie de propuestas y claves que "se deben tener en cuenta" a la hora de legislar. Así, Cáritas considera fundamental "acertar en el análisis de la causas, que son más profundas, severas y graves de lo que los análisis superficiales dan a entender", ha subrayado Mora.

Las políticas de inclusión activa deben simultanear la garantía de ingresos, las medidas de empleo y la prestación de servicios de calidad, ya que "¿cómo va a ponerse a estudiar alguien que no tiene para comer?", se ha preguntado Mora, quien también ha destacado la importancia de elaborar procesos o trayectos personalizados para salir de la exclusión.