CC.OO. y UGT se han negado a dar por reanudado el diálogo social tras reunirse hoy durante dos horas con la secretaria de Estado de Empleo, Mari Luz Rodríguez, y han insistido en que antes es preciso que el Gobierno rectifique. En este sentido, ambas centrales sindicales volvieron a pedir al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, una "señal" antes de avanzar en el diálogo tripartito. Según dijeron, dicho gesto debería ser una renuncia a elevar la edad de jubilación de los 65 a los 67 años y a congelar las pensiones, así como la marcha atrás de la reforma laboral.
En rueda de prensa, los secretarios de Acción Sindical de CC.OO. y UGT, Ramón Górriz y Toni Ferrer, respectivamente, coincidieron en dar a la reunión de hoy un carácter informativo y apuntaron que el diálogo social va más allá de un conjunto de reuniones, puesto que "es un diagnóstico compartido que ahora mismo no existe".
En este sentido, ambas centrales sindicales volvieron a pedir al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, una "señal" antes de avanzar en el diálogo tripartito. Según dijeron, dicho gesto debería ser una renuncia a elevar la edad de jubilación de los 65 a los 67 años y a congelar las pensiones, así como la marcha atrás de la reforma laboral.
Así pues, los sindicatos sostienen que el conflicto que motivó la huelga general del 29 de septiembre "sigue abierto" y siguen condicionando la reanudación del diálogo social a que se dé marcha atrás en los aspectos más lesivos de la reforma laboral.
Por otro lado, CC.OO. y UGT cargaron contra la patronal por su falta de iniciativa de cara a la reforma de la negociación colectiva y reiteraron que el plazo de seis meses establecido en la reforma laboral "no incentiva" el acuerdo.
MARCELINO IGLESIAS: LA REFORMA SIGUE
El presidente del Gobierno de Aragón y secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias, ha afirmado hoy que la reforma laboral es imprescindible y que sigue adelante, pero con voluntad de mantener el diálogo y de "ajustar todo lo que sea ajustable". Así lo ha asegurado en su intervención en Zaragoza en el Foro Cinco Días, en el que ha dado "el mayor valor" a la reunión hoy entre el Gobierno y los sindicatos para recuperar el diálogo social tras una etapa de dificultades a propósito de la reforma laboral.
Tras destacar que la reforma laboral es imprescindible y que el Gobierno entiende que no sea aplaudida por los agentes sociales, ha subrayado que ésta sigue adelante, pero "con una voluntad de mantener el diálogo y de ajustar todo lo que sea ajustable, mejorar todo lo que sea mejorable".
Ha insistido en que las reformas emprendidas en España son necesarias para que la economía pueda superar rápidamente la etapa de depresión para volver a crecer, tanto la laboral como la del sistema financiero y también la de las pensiones, y en ese aspecto ha asegurado que el Gobierno mantendrá su propuesta de ampliar de los 65 a los 67 años la edad de jubilación.
El Ejecutivo, ha añadido Iglesias, llevará esa propuesta al Pacto de Toledo para su negociación porque lo que se pretende es garantizar las pensiones. "Cualquier Gobierno responsable haría eso", ha agregado Iglesias, quien se ha mostrado "absolutamente convencido" de que quienes se sientan en el Pacto de Toledo "tendrán muy claro que quieren una estrategia que garantice que nuestros hijos y nuestros nietos tienen seguridad en sus pensiones".