Los vecinos de la calle donde tirotearon a un joven dominicano de 16 años denuncian la inseguridad en la zona. En la misma calle se han producido hasta tres incidentes violentos en menos de un año. Entre ellos una pelea de catanas, y otra reyerta en la que cortaron un brazo a una persona. Es habitual, dicen, ver allí a miembros de bandas latinas. La policía sospecha que tras el asesinato de Jorge Luis hay un rito de iniciación.