Conocemos a Manolo, uno de los tres organilleros que quedan en Madrid. Lleva 30 años tocando el organillo como aficionado. En 1883 los hermanos Luis y Gerardo Apruzzese trajeron a Madrid desde Italia los primeros organillos. Manolo estará con su organillo durante las fiestas de la Virgen de la Paloma en la taberna Muñiz, en la calle Calatrava.