Un agente de Policía Nacional que se encontraba fuera de servicio ha evitado el atraco de una farmacia en el madrileño barrio de Carabanchel y ha conseguido inmovilizar a uno de los tres asaltantes que accedieron al establecimiento.
En declaraciones a los medios, el agente de la Policía que realizó la actuación, Samuel Rodríguez, ha explicado cómo estos tres asaltantes entraron en la farmacia con los rostros cubiertos y calcetines en las manos y comenzaron a amenazar a los clientes y trabajadores.
El agente, que realizaba unas compras en la farmacia, siguió en un primer momento las indicaciones de los asaltantes, hasta que se abalanzó sobre uno de ellos y consiguió reducirlo. El resto de atracadores huyó del lugar, pero fueron detenidos horas más tarde.
Los hechos ocurrieron hace pocos días sobre las 21.00 horas. Según ha relatado Rodríguez, varias personas se encontraban en el interior de la farmacia, cuando observaron la llegada de los tres individuos, quienes portaban las manos en los bolsillos simulando empuñar pistolas. Uno de los tres asaltantes sujetaba la puerta de acceso, mientras los otros dos amenazaba e intimidaba a los allí presentes.
El agente ha declarado que los atracadores irrumpieron en la farmacia de manera muy agresiva y violenta. En un primer momento, se tumbó en el suelo siguiendo sus indicaciones, y poco después el policía nacional se abalanzó sobre uno de los atracadores manteniendo un fuerte forcejeo y consiguió inmovilizarle en el suelo mientras que otro de los asaltantes le lanzaba objetos que había cogido de una estantería.
Los otros dos atracadores decidieron escapar del lugar, aunque apenas horas más tarde fueron detenidos gracias a las características físicas aportadas por clientes y trabajadores de la farmacia.
El agente adscrito a la Comisaría de distrito de Carabanchel ha manifestado no haberse visto "jamás" en una situación de este tipo, y ha proclamado sentirse muy contento por su actuación y por haber sido felicitado por los allí presentes.