La Policía Nacional ha desarticulado en la Cañada Real, en Madrid, un clan familiar de narcotraficantes que ocultaba las armas en la habitación de los niños. Según informó este cuerpo de seguridad, en el registro del domicilio los agentes a la vivienda de estos "narcos" se localizaron un fusil de asalto, dos escopetas y una pistola, todas ellas ocultas detrás de la cama de los niños. En la parcela también encontraron pequeñas cantidades de heroína y cocaína y otros efectos destinados al tráfico de estupefacientes, así como; 1.000 euros en efectivo y tres vehículos de alta gama.
Los cinco detenidos traficaban con droga al por menor y estaban perfecamente organizados a la hora de distribuirse las diferentes tareas dentro de la organización. Uno se encargaba de la adquisición y el transporte de la droga antes de su antes de su distribución, mientras que otro era el responsable de las medidas de seguridad en el entorno de la vivienda que utilizaban como punto de venta. Los tres restantes participaban en las diferentes tareas del narcotráfico. Los cinco constituían un clan familiar que presuntamente se dedicaba al tráfico de drogas en la Cañada Real.
La investigación se inició el pasado mes de enero. Las gestiones realizadas condujeron a los agentes hasta esta parcela donde pudieron constatar que se traficaba con droga al por menor. Los investigadores acreditaron que la afluencia de "clientes" al inmueble era constante.
Finalmente, las cinco personas detenidas fueron puestas a disposición judicial y ya se ha decretado su ingreso en prisión. La investigación fue llevada a cabo en su totalidad por el grupo XIV de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.